Uno, que ya peina canas, ha visto de todo en el mundo putrefacto de la política. Absolutamente de todo. Y cuando crees que estás a salvo de todas las sorpresas, cuando piensas que la desfachatez del político “de raza” no puede ir más allá, cuando te juras a tí mismo que el ser humano no puede caer aún más bajo..

Llega cualquier político, y te sorprende. 

Y doy fe que sorprendido estoy. Dado que ya las barrabasadas delictivas y totalmente amorales de los políticos no pueden por menos que dejarme impávido, impasible el ademán, lo que aumenta cada día es la soltura y la desvergüenza absoluta con la que estos tirillas de la política, estos barbianes de rostro abotargado por a saber qué vicios, ejecutan sus trapacerías delante de todo el personal, con un absoluto descaro y sin cambiar el gesto, aunque, como en el caso que nos ocupa, estén ejecutando una total, completa y absoluta traición a España.

¿Cómo llamar, Voto a Cristo, a este partido “Fanta Nararanja” que a todas luces, con todo descaro y sin ningún disimulo obedece, humillando la testuz, las órdenes que los masones de mandil en cintura y nalgas apretadísimas les largan desde El Elíseo –Macron– o desde Andorra –Manuel Valls-?

Pues eso.

Ciudadanos es un partido que se caracteriza por poseer un principios muy abundantes. 

Los tiene todos. 

Los de izquierdas, los de derechas, los de centro y los mediopensionistas.

¿Que sentido del honor y de la moralidad guía a Ciudadanos? El mismo que guía a una chica de vida alegre: la tarifa que pueda cobrar al más incauto del lugar. 

Y sí, si imaginan ustedes que estoy comparando el comportamiento moral del Partido Naranja (podrida) con el de las practicantes del oficio más antiguo del mundo… 

Aciertan. Del todo. 

Pongámonos serios: jamás había pasado tanta vergüenza como la que he pasado viendo las acciones de Ciudadanos los últimos días. Toda una obra de teatro de gestos exagerados, alaridos, drama, para, al final, acabar enfundándose la …. eh… la soberbia y aceptando los votos de VOX que tanto ha despreciado, insultado y humillado.

Pero, un momento.

¿A cambio de qué?

Ciudadanos es lo que es por un motivo: le da igual la pareja de cama mientras pague. Eso tiene un nombre. Aquí y en Babilonia. Esto lo tenemos claro.

Pero queremos creer, de verdad queremos creer que VOX ha votado a C’s a cambio de algo SIGNIFICATIVO.

No quiera Dios que todo este pasteleo haya sido por una vicepresidencia de más o de menos.

QUEREMOS y EXIGIMOS saber, conocer y estudiar que ha conseguido VOX por apoyar a C’s. Y más vale que sea algo útil, palpable y que esté en el programa de VOX.

Que, por una vez, la maldita política no caiga en el albañal de las cosas muertas y podridas.

Estamos hartos del olor a cadaverina y a putrescina de la política de pactos en nuestra España.

Aire Fresco, por favor.