Si a día de hoy se tuviese que buscar una relevación en el fútbol español, sin duda alguna que el nombre del Osasuna estaría de lleno en esa disputa. El conjunto navarro se encuentra cuajando una temporada muy completa, más allá de las expectativas que muchos le pudiesen dar antes de iniciar la campaña en curso.
Si se trata del campeonato liguero, los de Jagoba Arrasate ocupan una muy meritoria 7ª posición, estando a nada más que tres puntos del cuarto lugar, en manos del Atlético de Madrid con 31 unidades y que otorga el último pasaje a Champions, con 18 fechas disputadas hasta el momento.
Mientras tanto, en el apartado copero, el Osasuna sigue sorprendiendo a propios y extraños. En días recientes, dio un nuevo golpe en la Copa del Rey, eliminando al Sevilla en los Cuartos de Final para ser uno de los cuatro conjuntos que disputen las semifinales, contra todo pronóstico, según las cuotas de wetten.com.
El partido disputado en su recinto, el estadio de Pamplona, Osasuna le regaló una nueva alegría a su público, en un sufrido, pero, al final, merecido pase a la siguiente instancia de la competición, donde ahora, se verá las caras ante Barcelona, Real Madrid o Athletic Club, los otros clasificados para esta fase, según lo que designe el sorteo del próximo lunes.
Por pizarra de 2-1 los de casa doblegaron a la causa ‘Nervionense’, que en las postrimerías del encuentro en el tiempo reglamentario empató, de manera agónica, el duelo y lo mandó a la prórroga, cuando todo parecía acabarse en los 90’.
Las emociones del partido se vivieron durante el final del mismo, después que la paridad se hiciese cargo del mismo durante 70 minutos, sería el delantero argentino, Chimy Ávila, el encargado de poner la ventaja para los de casa, que, en ese momento, por lo disputado y parejo del encuentro, daba toda la impresión de darles el pase a semis.
Un centro al área visitante vio como Rubén García le pivoteó, de cabeza, el balón al Chimy, que de espaldas al arco, giró para hacerse el espacio ante la marca de Badé y sacar un disparo colocado que venció la resistencia de Bono, a los 71’.
Sin embargo, en la última acción del duelo, el Sevilla lograría igualarlo por medio de En-Nesyri. Cuando el reloj marcaba la fracción 90+5, un peligroso y cerrado centro de Suso desde la derecha tuvo al atacante marroquí como finalizador, anticipándose a todos en el área chica para anotar de izquierda y enviar el partido al alargue.
En el primer tiempo del tiempo extra, otro marroquí, pero ahora del bando local, volvería a desatar la locura en El Sadar. Luego de una gran habilitación de Moncayola, Abde se fue de cara a la portería mano a mano con Badé, su último impedimento antes de plantarse con Bono.
Buscando abrirse el espacio para el remate, el habilidoso extremo de 21 años, ficha del FC Barcelona, recortó hacia la derecha, dando toda la impresión de que su disparo iría colocado sobre el segundo palo de su compatriota, no obstante, Abde sorprendió con un disparo raso al primer palo, que dejó sin oportunidades, una vez más, a Bono y significó el 2-1 a los 99’ que ya no se movería de la pizarra.
Osasuna fue subcampeón de la Copa del Rey en 2005
Ya sobre el final de la prórroga, Sevilla intentó nuevamente llegar al empate, pero se encontraron con la figura del meta de casa, Sergio Herrera, que no permitió que los suyos volvieran a perder la ventaja.
Con este acceso hasta las semifinales, el Osasuna queda a un paso de emular su mejor participación en el torneo, la cual sucedió hace ya unos 18 años, cuando en la temporada 2004/05 llegaron a la final de este certamen y perdieron ante el Real Betis, por 2-1 en tiempo extra. Aquella vez, también eliminaron al Sevilla, en la ronda de 4º.
Hasta ahora, la campaña ‘Rojilla’ está siendo destacada por donde se le mire. Nada en Copa, para internarse entre los mejores cuatro, dejaron afuera varios rivales en el papel superiores. Para llegar a cuartos, tuvieron que verse las caras ante el campeón defensor, Betis.
También en condición de local, Osasuna hizo respetar su feudo y mandó a casa al campeón reinante, en un dramático partido que se definió en la tanda de penales (4-2) y en la que los anfitriones estuvieron en desventaja en par de ocasiones, tanto en el tiempo regular como en la prórroga.
Y ahora, frente a los de Sampaoli, que más allá de no estar viviendo un buen presente, son uno de los equipos más representativos del fútbol español en los últimos años, los de Arrasate vuelven a demostrar que no es casualidad lo que se encuentran haciendo desde el inicio del curso.