Que la Familia es pieza clave de la Sociedad, es un axioma irrefutable. Sin el imprescindible relevo generacional las Sociedades están abocadas a su extinción. Y serán sustituidas por otras que si lo hayan previsto. Así de simple, así de sencillo.
En España no se hacen Políticas de Familia. A lo más que se llega es a apoyar la ideología de género, el aborto o el Orgullo de ser «distinto». De pena.
Con el índice de natalidad más bajo de Europa y el penúltimo del Mundo. Lamentable.
En Hungría, preocupados por el problema, se han puesto manos a la obra para arreglarlo.
Y así, el IRPF se verá reducido en un 25% por cada hijo a cargo. De manera que al llegar al cuarto hijo, el IRPF queda eliminado DE POR VIDA para ambos progenitores.
Respecto a la vivienda, el mismo tanto por ciento acumulativo de reducción, cuyo costo sufragará el Estado. También adiós hipoteca al cuarto hijo.
Y el círculo de apoyos importantes (hay más), se completa con que los Abuelos con nieto a cargo serán debidamente remunerados hasta que el bebé cumpla tres años.
Por si alguien está pensando que Hungría es un País mucho más rico que España, ahí van los datos:
El PIB (riqueza nacional) es cinco veces inferior al de España.
Y la Renta per Cápita (riqueza personal), menos de la mitad. Exactamente un 40% de la que aquí «gozamos».
Lo que pasa es que allí saben poner el Orden de Valores y Gastos debidamente. Aquí no.
Y así nos va…