Connect with us

España

Sánchez, ante su tercer intento de investidura: ERC y Torra decidirían el destino de España

Avatar

Published

on

¡Comparte esta publicación!

Es la tercera vez que lo intenta y aún le quedan cabos por atar, sobre todo el más complicado con ERC, pero Pedro Sánchez parece tener más posibilidades que nunca para, esta vez sí, ser investido por el Congreso presidente del Gobierno.

Así debe de haberlo entendido Felipe VI, porque le ha propuesto como candidato tras concluir la ronda de consultas. Pero como diría el antecesor de Sánchez en La Moncloa, Mariano Rajoy, los flecos que le quedan al líder socialista no son cosa menor.

Empezando por la cuestión más espinosa: Cómo se va a materializar ese diálogo sobre el conflicto catalán que exige Esquerra como condición para permitir la investidura.

La indefinición sigue ahí. O más bien el silencio absoluto. Porque Sánchez no ha dejado claro cómo se va a definir ese diálogo. Y ni el PSOE ni ERC dan pistas sobre lo que se puede estar acordando.

Advertisement

Esta noche en La Moncloa, Sánchez ha defendido la discreción sobre la marcha de las negociaciones con Esquerra para permitir que fructifiquen, y ha agradecido a los independentistas su disposición.

Y aunque él no ha querido ponerle “adjetivos” a dichas negociaciones, su socio principal y futurible vicepresidente, Pablo Iglesias, aseguraba esta tarde que las conversaciones entre socialistas y ERC van “en la buena dirección”.

Pero no sólo hacia Esquerra tendrá que dirigir Sánchez sus atenciones, porque también se las están pidiendo los demás partidos que necesita para que su investidura sea una realidad.

Quieren compromisos específicos de los socialistas, y no tienen intención de regalar su voto por muy minoritario que sea, como han advertido algunos de esos portavoces en esta ronda de consultas.

No son, en cualquier caso, condiciones insalvables, y podrán exponerlas al PSOE, porque Sánchez ha anunciado que la portavoz de su partido, Adriana Lastra, se va a reunir con todo el arco parlamentario. Todo. Incluidos Vox y Bildu, con los que hasta ahora no hablaban.

Advertisement

Pero además, el líder socialista ha anunciado otra ronda de contactos que le puede valer para calmar los ánimos internos en su partido.

Se trata de las llamadas que hará a todos los presidentes autonómicos, incluidos los socialistas Javier Lambán y Emiliano García Page, que han criticado sin tapujos las conversaciones con los separatistas.

Y entre esas llamadas, además, estará la que le haga al presidente de la Generalitat, Quim Torra, a quien no quería hasta ahora ni coger el teléfono. Otro gesto más hacia el independentismo.

Habrá que ver cómo evolucionan las negociaciones para poder resolver la otra gran incógnita: La fecha de la investidura.

Una vez más, Sánchez insiste en que lo importante es el “qué” y no el “cuándo”, mientras repite su disposición al consenso, a hablar con todos y a que cuanto antes se ponga en marcha su Gobierno progresista con Podemos, mejor.

Advertisement

Sea cuando sea la cita, será la tercera vez que Pedro Sánchez se someta a la confianza del Congreso para ser investido presidente del Gobierno. Ninguna de las otras dos ocasiones lo consiguió. La primera fue en marzo de 2016, cuando el Rey le propone como candidato después de que el ganador de los comicios, Mariano Rajoy, declinara serlo por no tener los apoyos necesarios.

Y la segunda el pasado mes de julio, cuando vio cómo el Congreso rechazaba su investidura tras el fracaso de las negociaciones con Podemos. Un escenario muy distinto al actual, con la formación morada y su líder a punto de entrar en el Consejo de Ministros si sale adelante, esta vez sí, la investidura de Sánchez.

Porque si le va bien, a la tercera irá la vencida, y Pedro Sánchez, el único presidente elegido mediante una moción de censura, experimentará por fin acceder al cargo por la vía ordinaria.

Sánchez y su dependencia de ERC y… Torra

El líder del PSOE, Pedro Sánchez, ha aceptado ir por tercera vez acudir a una sesión de investidura sin tener de antemano los apoyos garantizados, pero con dos novedades respecto a los anteriores intentos: con una negociación abierta con ERC y tras hablar con “todos” los presidentes autonómicos, lo que incluye a Quim Torra.

Advertisement

El candidato ha comparecido en el Palacio de La Moncloa después de que el rey haya comunicado a la presidenta del Congreso, Meritxell Batet, su decisión de proponer a Sánchez para la investidura, y después de que ésta informara sobre la misma.

Pasadas las 21.30 horas, en una comparecencia en la que ha respondido a sólo dos turnos de preguntas (los demás representantes políticos no han puesto límites de ninguna clase en sus ruedas de prensa), el secretario general del PSOE ha anunciado que ya el lunes que viene tendrá sendas reuniones con el líder del PP, Pablo Casado, y con la portavoz parlamentaria de Cs, Inés Arrimadas.

También hará una ronda de contactos con “todos los presidentes autonómicos” y hablará con el presidente de la FEMP, Abel Cabellero, alcalde socialista de Vigo, como representante de los entes municipales.

Paralelamente, la portavoz del PSOE en el Congreso, Adriana Lastra, se reunirá con todos los partidos representados en la Cámara, y al decir “todos” el presidente en funciones ha dado a entender que en la ronda añadirá a Vox y a EH Bildu, con los que los socialistas habían evitado contactos públicos hasta la fecha.

Sánchez, por tanto, afrontará una nueva sesión de investidura sin los votos suficientes a su favor. Hasta la fecha cuenta con los 35 síes de los diputados de Unidas Podemos, con el que puede formar un nuevo Gobierno de coalición, y con el del PRC.

Advertisement

Asimismo, un equipo negociador del Partido Socialista lleva ya tres reuniones con otro equipo negociador de ERC para conseguir la abstención de la formación independentista, lo que allanaría las opciones de Sánchez para seguir de presidente. Los resultados no se conocen todavía, pero el líder del PSOE ha destacado este miércoles que “todo acuerdo será público” y estará dentro de la Constitución.

La presidenta del Congreso tendrá que determinar la fecha en las que se celebre la sesión de investidura, lo que anunciará tras hablar con el candidato. Parece evaporarse la posibilidad de enmarcar la fecha de la investidura antes de las navidades, e incluso antes de fin de año, como eran las pretensiones iniciales del PSOE y de Unidas Podemos.

Tras su entrevista con el rey, el líder de la formación “morada”, Pablo Iglesias, ha enfriado esta tentación al considerar que las negociaciones entre el PSOE y ERC deben seguir su ritmo, y si éste apunta a una probable investidura en enero, ha dado por bueno que sea en enero.

Aunque Sánchez verá a Casado el lunes, no parece que el PP se mueva del rechazo al candidato socialista, hasta tal punto que su presidente ha subrayado que si Sánchez fracasa otra vez, “debe dejar paso” a otro. “Esta es su última oportunidad, pase lo que pase”, ha afirmado.

Tampoco se esperan cambios en la posición de Vox, cuyo líder, Santiago Abascal, ha dejado claro su “no”. Ahora bien, ha avanzado que si un Gobierno decidiera restaurar el orden constitucional en Cataluña, que cree roto, su formación lo respaldará, incluso si lo lidera el PSOE.

Advertisement

Y en Cs la posición sigue en el rechazo, pero la puerta al cambio de criterio sigue abierta. Inés Arrimadas ha insistido en reparar en la fórmula de los 221 escaños, los del PSOE, el PP y Cs, para poner en marcha un Gobierno “constitucionalista, moderado y sensato”.

Iglesias ha ahondado en el optimismo de los últimos días cara a la resolución de las negociaciones con el PSOE, para la formación del Gobierno, y a las de los socialistas con los indepentistas republicanos; pero también se ha mostrado prudente y paciente.

En las confluencias de Unidas Podemos no hay tanta paciencia. El portavoz de En Comú Podem, Jaume Asens, ha abogado por ir más deprisa, convocar más reuniones a la semana y propiciar la investidura pronto. Ha apelado a ERC y a JxCat.

Advertisement
Advertisement
Click para comentar

Escriba una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

España

Así nos ven desde fuera: el sucio traidor de Feijóo y sus adláteres son reconocidos por lo que son

Avatar

Published

on

¡Comparte esta publicación!

Escándalo en España: El PP se unió al socialismo y votó a favor de darle la ciudadanía a 500.000 inmigrantes ilegales de África

El PP, el PSOE y todos los partidos de izquierda se unieron para votar a favor de la regularización de medio millón de inmigrantes que ingresaron de manera ilegal en la última década.

El Partido Popular (PP), una suerte de Juntos por el Cambio en España, ha vuelto a traicionar a su base de votantes y decidió unirse con la extrema izquierda para regularizar y otorgarle la ciudadanía a más de 500.000 inmigrantes ilegales que arribaron al país desde África o Medio Oriente.

Si bien la ley todavía no ha sido aprobada, más bien solo se ha aprobado el tratamiento del mismo en el Parlamento, el PP sienta un peligroso precedente y ha anticipada que busca volver a votar de la misma manera en el recinto una vez que se modifiquen algunos aspectos del proyecto de ley.

De hecho, todos los partidos en el Parlamento han votado a favor del tratamiento y aprobarán pronto la ley, con la única excepción de los legisladores de VOX, que se opuso de cuajo contra la ley que le agregaría más de 500.000 votos en todo el país a la izquierda.

Advertisement

Según la diputada del PP, Sofía Acedo, fue Cáritas, la organización benéfica de la Iglesia Católica, que hizo lobby para que dicha legislación sea aprobada, a pesar de que dentro de ese medio millón de personas hay prácticamente una totalidad de árabes musulmanes.

Por su parte, la socialista Elisa Garrido ha trasladado que el PSOE votará a favor de la Iniciativa Legislativa Popular (ILP) por el “respeto” que merece darle participación directa en la política a quienes viven en España, y que creen que es necesario “seguir avanzando en mecanismos que garanticen procesos seguros de inmigración”.

Por su parte, la diputada de VOX Rocío De Meer ha indicado de nuevo que la formación liderada por Santiago Abascal rechaza la medidaQueremos que España siga siendo España, no Marruecos, ni Argelia, ni Nigeria, ni Senegal. Y esto no es odio ni es xenofobia, ni racismo, es puro sentido común“.

En España se han llevado a cabo seis regularizaciones extraordinarias de inmigrantes en toda su historia. Entre 1991 y 1992 se puso en marcha, con el Gobierno socialista, una regularización extraordinaria que benefició a 108.321.

En 1996, con el PP mediante otro proceso de regularización extraordinaria, obtuvieron papeles 21.294 inmigrantes de los 25.128 que lo solicitaron. En el año 2000 solicitaron la regularización 244.327 extranjeros y consiguieron la documentación 163.352. En el año 2001 fue denominado “regularización por arraigo” y se otorgó papeles a 239.174 inmigrantes más.

Advertisement

Como si esto no fuera poco, en el 2005, durante el gobierno del comunista José Luis Rodríguez Zapatero, hace casi 20 años, se le otorgó ciudadanía a medio millón de inmigrantes, la misma cantidad que pretende dar ahora Pedro Sánchez, peleando codo a codo por el récord histórico de pérdida de identidad.

Fuente: Derecha Diario.

Continuar leyendo