Connect with us

Opinión

Lo que puede el dinero: ¿Qué habrán pactado la Conferencia Episcopal y el PSOE?

Avatar

Published

on

¡Comparte esta publicación!

El lunes, 27 de mayo, “el día después” de las elecciones municipales, regionales, etc. que, diría cualquier contertulio, comunicador u opinador de las diversas televisiones y restantes medios creadores de opinión; durante la cena estuve “zapeando” para intentar ver y oír qué contaban las diversas televisiones acerca de la jornada electoral, sus resultados y sus consecuencias.

Tras mover el mando a distancia un rato, acabé en “la trece”, la cadena de televisión de la Conferencia Episcopal de la Iglesia de España, era el momento del programa que dirige Antonio Jiménez… ¡Cuál sería mi sorpresa cuando, tras muchos tópicos y como se dice hoy día “lugares comunes”, acabaron entrevistando por teléfono nada más y nada menos que a Guillermo Fernández Vara, presidente socialista de la Junta de Extremadura, y que con total seguridad seguirá siéndolo los siguientes cuatro años, pues su partido, el PSOE, ha conseguido mayoría absoluta en el parlamento regional.

A medida que Antonio Jiménez entrevistaba a Fernández Vara, mi sorpresa y mi estupor fueron subiendo de tono hasta cotas inimaginables. No olvidemos que la entrevista se estaba realizando en directo, en la única cadena de televisión de España que, se supone, que es católica.

Tanto el presentador como los contertulios presentes en la mesa de “el cascabel al gato”, le dieron un masaje cariñoso a Guillermo Fernández Vara, resaltaron su buen hacer, su íntima conexión con los extremeños… lo presentaron como el summum del buen gobierno, el mejor de los gestores posibles, de lo público… Ya digo, una entrevista insuperable, en la que –no podía faltar- hasta estuvo presente el chascarrillo, hasta tal punto que, el director del periódico ABC (que se supone que no es socialista ni de izquierdas) le recordó los buenos manjares que disfrutó con él en Olivenza, localidad de origen de Fernández Vara. Una entrevista casi lujuriosa, lasciva, orgiástica, desenfrenada… Solo faltó que Antonio Jiménez propusiera que se eleve a los altares a Guillermo Fernández Vara, presidente de la Junta de Extremadura, y católico confeso.

Advertisement

Insisto: yo no salía de mi asombro. Hasta le permitieron jactarse públicamente de que en la legislatura que echa a andar, Extremadura tendrá finalmente los trenes de cercanías, de medio y largo recorrido que no posee, y que si su partido, el partido gobernante, no hiciera realidad el deseo de todos los extremeños, de estar comunicados por tren, como cualquier territorio de España, él no lo consentiría (lo que no dijo es cómo haría para “no consentirlo”).

Ya digo, absolutamente alucinante siendo “la trece” la televisión donde le daban masajes y caricias a cual más amigable, al presidente de la región española que posee todos los records de lo que nadie desea, y todo ello a pesar de la inmensa cantidad de dinero que ha llegado a la región durante los últimos cuarenta años, especialmente los miles de euros procedentes de la Unión Europea, miles de millones de euros.

Si existe una muestra representativa del fracaso del socialismo en España, de mala gestión, de despilfarro, de derroche, de corrupción, de fraude generalizado es Extremadura, la Taifa del Suroeste, junto a Portugal, en la que se llevan sucediendo en los últimos cuarenta años gobiernos intervencionistas, tal es así que Extremadura es la única región española que está considerada por la Unión Europea “pobre”, región objetivo 1. La UE incluye en dicho objetivo a las regiones más atrasadas económicamente, y como consecuencia reciben trato preferente, o sea dinero, subvenciones, y más subvenciones, regalías…

Los socialistas que, han gobernado siempre en Extremadura, han hundido a la región, la han arruinado, la han mutilado, han impedido toda posibilidad de progreso. No han sabido aprovechar sus fantásticos recursos naturales, ni el talento de los extremeños; sólo han pensado en regar con dinero público actividades improductivas, de manera que cuando se acababa el dinero, se acababa la actividad económica.

Por supuesto, la política económica del PSOE (también la del PP, cuando presidía José Antonio Monago el gobierno de Extremadura) ha estado basada en un inmenso gasto público, organizado en múltiples subvenciones, un nivel de impuestos de los más elevados de España y un intervencionismo feroz en la economía,… las recetas típicas de la socialdemocracia.

Advertisement

Según las estadísticas oficiales, Extremadura es la región española con menor Producto Interior Bruto por habitante, y está situada un 30,9 % por debajo de la media nacional, siendo además la tercera región con menor crecimiento de su Producto Interior Bruto (PIB), concretamente un 2,4 %, frente al 3,1 % que alcanza la media nacional, según datos del Instituto Nacional de Estadística (INE).

Extremadura está la primera de la fila de todas las regiones españolas respecto de lo que se denomina “pobreza”.

La región extremeña es la menos industrializada de España, exceptuando Ceuta y Melilla. Y durante muchos años en Extremadura la construcción era posiblemente el lugar de España en el que el sector hacía una mayor aportación al PIB regional, lo cual explica parcialmente las causas singulares de la recesión extremeña, y por qué Extremadura es la región menos competitiva de toda España.

Casi el 11% de los empleados extremeños trabajan en la Agricultura (un 4,4% a nivel nacional), el 12% en la Industria (16% en España), un 14,1% en la Construcción y un 62,9% en los Servicios…

En Extremadura existen casi 90 funcionarios por cada 1000 habitantes, en el resto de España 55, siendo la proporción extremeña la mayor de todas las regiones españolas. En Extremadura, cerca del 30% de la población asalariada es funcionario público, el mayor porcentaje de España, cuya media no supera el 15%.

Advertisement

Extremadura ocupa en el último lugar del ranking español de productividad.

La tasa de paro en Extremadura, cercana al 25% de la población activa, es la mayor de toda España, pese a que la población lleva en términos absolutos estabilizada en la región los últimos 37 años y, pese a que la tasa de actividad es en Extremadura en torno al 50% de los habitantes mayores de 16 años y, en España superior al 60%.

Los costes salariales en Extremadura son los menores de toda España, circunstancia que lleva ocurriendo desde hace muchas décadas.

Cerca del 10% de los hogares extremeños tienen “oficialmente” desempleados a todos sus miembros en edad de trabajar.

Las exportaciones regionales respecto del total nacional son apenas el 0.6%, la cifra más pequeña de toda España, no habiendo variado esta proporción prácticamente desde el año 1995.

Advertisement

El Presupuesto de Gastos de la Comunidad autónoma, dedica alrededor del 35% de sus recursos a gastos de personal… y no deja de crecer.

Tradicionalmente el Presupuesto de la Junta de Extremadura dedica el 75% de los gastos a operaciones corrientes, y escasamente el 25% a inversiones. Presupuesto que se nutre solamente en un 25% de recursos de origen fiscal y más de un 65% de transferencias procedentes del exterior.

La administración regional es la mayor empresa de toda Extremadura.

Las empresas extremeñas apenas son el 2% de las empresas españolas, aproximadamente 70.000. De estas empresas, casi la mitad pertenecen al sector servicios, unas 20.000 al Comercio, no más de 10.000 a la construcción y, menos de 6.000 a la Industria. Más del 50% de esas empresas son trabajadores autónomos, y con menos de seis trabajadores (incluyendo al trabajador autónomo-empresario), existen registradas en Extremadura más de 50.000, casi el 90%, lo cual demuestra el minifundismo empresarial extremeño.

En España alrededor del 70% de las viviendas disponen de algún tipo de ordenador, en Extremadura no más del 55%; y si hablamos de conexión con banda ancha más o menos la misma proporción.

Advertisement

Alrededor del 70% de los asalariados de Extremadura son, como máximo, mileuristas (14 pagas).

Según cifras aportadas por la Agencia Tributaria, los extremeños son los que perciben las pensiones más bajas de toda España.

Extremadura es, también, la región con menores ingresos por hogar de España.

Apenas un 30% de los extremeños leen periódicos casi todos los días; el 60% nunca lee libros. Los extremeños dedican como media cuatro horas diarias a ver televisión.

Extremadura en las últimas cuatro décadas ha sufrido las consecuencias económicas, sociales, culturales y políticas, del poder hipnótico y anestésico del régimen caciquil ibarrista-varista, de Juan Carlos Rodríguez Ibarra y de Guillermo Fernández Vara (con el intermedio del gobierno de un tal Monago que pretendió ser más socialdemócrata que los socialdemócratas, y claro, la gente prefiere a los “auténticos” antes que a las malas copias), un régimen que dice ser “amigo de los pobres”, gente que cada vez que alcanzan el poder hacen que aumente el número de pobres.

Advertisement

De nada de todo esto se le preguntó a Guillermo Fernández Vara, pero, lo que ya se sale de ojo es que la cadena de televisión del episcopado masajeara, hasta el hartazgo, a un señor que ha hecho todo lo que estaba en su mano para perseguir a los católicos extremeños, intentando suprimir la enseñanza de la religión católico en los centros de estudio (en estos momentos los obispados de Extremadura aún tienen pleitos pendientes en los tribunales por tal motivo), un señor que ha introducido la enseñanza del Islam en los centros de estudio de Extremadura, un señor que ha hecho que la ideología de “género”, o mejor dicho sus partidarios campe por sus fueros, siendo una ideología totalitaria y liberticida, contraria a la vida (proabortista) cuyo objetivo es destruir la institución familiar, como primer paso para acabar con nuestra forma de vida, acabar con la civilización occidental judeocristiana…

Increíble, pero cierto…

No conformes con lo que narro, al día siguiente, martes, entrevistaron, loaron, masajearon hasta aburrir a nada menos que el alcalde de Vigo, Abel Caballero, correligionario de Guillermo Fernández Vara; y… ¡Asómbrense! Hablaron elogiosamente del alcalde de Cádiz, José María González Santos, más conocido como “Kichi”, anticristiano, antiliberal, anti todo lo que representa el Catolicismo y los Evangelios… y lo hicieron por “su buen hacer”…

En fin… Nada es gratis; ¿Qué habrán pactado los obispos españoles con el PSOE que les obliga hacer programas del estilo del que les hablo,… es “ésta” la única manera de que el gobierno, el estado siga recaudando dinero para la Iglesia, mediante la casilla de la declaración de renta, o de que siga manteniendo la misa dominical de la segunda cadena de televisión española… o acaso hay algún pecado imperdonable, para llegar a semejantes servidumbres?

Pues, como decía Juan Ruíz, Arcipreste de Hita, hace más de siete siglos: “Hace mucho el dinero… En resumen les digo, entiéndanlo mejor, el dinero es del mundo el gran agitador, hace señor al siervo y siervo hace al señor, toda cosa del siglo se hace por su amor.”

Advertisement

Advertisement
Click para comentar

Escriba una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Opinión

La última bala de Sánchez: “Currarse la página de la pena”. Por Ernesto Milá

Ernesto Milá

Published

on

¡Comparte esta publicación!

Así se llama en términos carcelarios, así se llama el último intento de mejorar la situación durante una condena: “currarse la página de la pena”. Es lo que está haciendo Pedro Sánchez con su carta en la que “estudia dimitir por amor a Begoña”. En realidad, si se lee la carta, se percibe con mucha más claridad que intenta polarizar aún más al país. De hecho, desde la presentación (“Carta a la ciudadanía”) se percibe que esta carta no es más que la apertura de la campaña electoral en Cataluña y en las europeas. Podemos estar, claro, equivocados y, a fin de cuentas, lo que pretenda Sánchez es “librarse de tanto sufrimiento” por los ataques que se vienen repitiendo contra él y su mujer -justificados, por otra parte- en los dos últimos meses. Veamos las distintas alternativas.

¿SÁNCHEZ VA DIMITIR?

TODO LO QUE AVALA UNA RESPUESTA AFIRMATIVA

No puede olvidarse el contexto en el que ha aparecido esta carta, caracterizado por:

Advertisement

A.- La reapertura en Francia de la investigación sobre las filtraciones del programa Pegasus: si bien en España, Sánchez controla a la fiscalía, no puede hacer nada contra una investigación iniciada en Francia. En España, la filtración de Pegasus se llevó por delante a la directora del CNI. Poco más. Y la cuestión es muy grave, de hecho, es gravísima: un país, inicialmente “amigo” -Marruecos- utiliza un programa para espiar las conversaciones telefónicas del gobierno español. Desde que se supo, el problema no es el hecho en sí, sino lo que “sabe” la inteligencia marroquí sobre Pedro Sánchez.

Pegasus es importante y significativo por dos elementos:

1) Fue a partir de entonces cuando cambió significativamente la política del gobierno en relación al Sahara, mostrándose favorable a Marruecos y rompiendo con Argelia. La política de apoyo a la resolución de la ONU que proponía un referendo para la población saharaui, había sido constante y tradicional en todos los gobiernos de España desde la transición. Romperla, implicaba también, ofender a Argelia, primer exportador de gas natural a España, en el peor momento: cuando había estallado el conflicto ucraniano. El cambio de política sobre la cuestión del Sáhara era, por tanto, injustificable, contrario a los hábitos diplomáticos y opuesto en sus consecuencias a los intereses de España.

2) Pegasus es un programa espía de patente israelí, aupado por el Mosad. Este elemento es importante: la crisis actual coincide con un momento en el que Sánchez -huyendo de su creciente impopularidad en España- ha asumido el rol de “misionero internacional para el reconocimiento del “estado palestino”. Esto le ha supuesto un aumento de su prestigio en la escena internacional, pero también el odio eterno de Israel. En realidad, el Mosad, lo que ha hecho con Pegasus no ha sido otra cosa que extender su influencia en dirección a otros servicios de inteligencia internacionales. El de Marruecos, por ejemplo. Es posible, incluso, que el propio programa, en su concepción, permita a Israel acceder a los mismos conocimientos que obtiene quien lo ha comprado. Si esto es así -y es muy posible que lo sea- lo que “sabe” Rabat de Sánchez, lo sabría también el Estado de Israel.

B.- La comisión de investigación sobre el “Caso Koldo” en el Senado. La endiablada situación política española después de que el PP se impusiera en votos y escaños en las pasadas elecciones, pero Sánchez consiguiera el apoyo de los partidos de izquierda, nacionalistas e independentistas para ser elegido presidente, a cambio de realizar concesiones ilimitadas, ha precipitado el que, tras conocerse el “Caso Koldo” se creara una “comisión de investigación” en el Senado, controlado por el PP. A pesar de las limitaciones de estas comisiones (y de que, hasta ahora, nunca han aclarado nada) , lo cierto es que la comparecencia de Salvador Illa hizo que aumentaran las sospechas de complicidad de la presidencia en la “trama Koldo”. Este hecho no se escapó a los periodistas que constataron la inseguridad con la que Illa contestó algunas preguntas y no estuvo en condiciones de responder satisfactoriamente al hecho de que recibiera en su despacho ministerial a alguien como ”Koldo”, que no era oficialmente, más que un chófer-guardaespaldas de otro ministro.

Advertisement

Y esto es importante por dos factores:

1) Por que Illa es el candidato que encabeza la lista en las próximas elecciones autonómicas a Cataluña a celebrar en el mes de mayo. La declaración ante el senado y las reacciones de la prensa, inevitablemente suscitarán una caída en sus expectativas de voto. Sánchez, con su amenaza de dimisión, habría querido recuperar el terreno perdido, especialmente con sus socios parlamentarios (ERC se mostró muy hostil a Illa en la comisión).

2) La amenaza de dimisión, también era una forma de decirles: “Si me voy yo, os quedáis sin amnistía y el que venga detrás, seguro que no es da tantas facilidades como os doy yo”. Así trataría de evitar, de una vez por todas, nuevos chantajes parlamentarios por sus socios en cada votación. Y si los socios valoran la situación verán que, con un PP en la Moncloa, condicionado por los votos de Vox (aunque no formara parte del gobierno), la situación de privilegio de la que gozan nacionalistas e independentistas, concluiría abruptamente.

C.- Ni el “Caso Begoña”, ni el “Caso Mascarillas” han concluido. En ambos casos, la prensa está en estos momentos trabajando en distintas líneas. Estas investigaciones llevan su tiempo. Ningún medio está dispuesto a jugarse una querella multimillonaria por difamación, ni del presidente, ni de Begoña, ni de los ministerios afectados por estos casos. En otras palabras: de la misma forma que, judicialmente, estos casos están solamente en sus primeras fases de investigación, en lo que se refiere a los medios de comunicación, hay mucho más material todavía no publicado (y que, sin duda, irá deslizándose por goteo en las próximas semanas y meses) que comprometería gravemente la posición y las afirmaciones del gobierno.

Todo esto es importante por dos factores:

Advertisement

1) En el “Caso Koldo” están implicados altas autoridades del Estado (la número tres del Estado, la presidenta del Congreso, Francina Armengol que durante la pandemia era presidenta de la Comunidad Autónoma Balear), varios ministerios y varios presidentes de comunidades autónomas entonces gobernadas por el PSOE. Pero todavía es más grave el contexto en el que se produjo el “caso”: una pandemia que el propio gobierno, tras la manifestación feminista del 8 de marzo, declaró el “confinamiento”, generó una campaña de terror primero en torno a la peligrosidad del virus, aplicó los protocolos de la OMS para tratar la enfermedad (que hoy se tiene la convicción de que contribuyeron a aumentar la víctimas) y, para colmo, recomendó una vacuna (no obligatoria pero sí en la práctica para aquellos que querían viajar al extranjero y para los trabajadores de empresas importantes) cuyas secuelas explican la inflación de muertes que se ha producido con posterioridad y, que el propio ministro Illa promocionó mostrando una fotografía de “cómo se vacunaba”… a pesar de que declaró en la comisión de investigación del senado que él “no se había vacunado”.

2) El “Caso Begoña”, abierto por un juzgado madrileño después de una denuncia de “Manos Limpias”, es inédito en la historia política del mundo civilizado. Todas las mujeres de presidentes, simplemente, o no habían actuado en política o si habían actuado era presentándose como candidatas en una lista electoral (casos de la esposa de Felipe y de la esposa de Aznar). Pero el hecho de que Begoña correteara en once ministerios del gobierno de su marido y obtuviera buenos contratos, subvenciones y beneficios para empresas que “asesoraba” resulta inédito en cualquier concepto democrático. A eso se le llama sospecha de “tráfico de influencias”. Sospecha, por otra parte, fundada. Siendo todavía más grave porque en algunos de los casos investigados las subvenciones eran con fondos europeos. Y, el problema para Sánchez es que las gestiones de su esposa fueron realizadas con una sensación total de impunidad y dejaron rastros suficientes (de momento, dos cartas firmadas por ella, de “recomendación”) que permiten seguir la pista con facilidad.

D.- El fracaso del contraataque socialista ante la corrupción. A partir de conocerse el “Caso Koldo” y sus ramificaciones y despuntar las primeras informaciones del “Caso Begoña”, los socialistas cometieron un error doble de comunicación: en primer lugar, desempolvaron casos ya vistos y juzgados de corrupción que afectaban al PP. Era una forma de decir “y tú más” y creer que así se desactivaba la información. En segundo lugar, trataron de crear un caso que afectara al PP allí en donde más le duele a Sánchez: en Madrid. Aprovechando que Isabel Díaz Ayuso era uno de esos empresarios oportunistas a la caza de buenos negocios a la sombra de la administración, el PSOE creó el “Caso Ayuso-Mascarillas”, pensando que contrapesaría al “Caso Koldo”. Sin embargo, la desproporción entre los dos casos pronto fue evidente: las acusaciones contra González Amador, tenían que ver con impagos a hacienda por ventas de mascarillas, antes de que fuera pareja de Díaz Ayuso. Y, además, ya se había pactado con Hacienda la resolución del caso para evitar el juicio. Aquí, fue donde se comprobó también la colaboración del Fiscal General en la ofensiva del PSOE, filtrando fría, deliberadamente, datos sobre un ciudadano privado que había reglado su situación con Haciendo. No había más vuelo para el “Caso Ayuso-Mascarillas”. De hecho, jamás existió. Mientras, se seguían filtrando más y más datos sobre los casos “Begoña” y “Koldo”.

Y esto es importante por dos elementos:

1) El fracaso del “y tú más” y el poco recorrido de los ataques contra Díaz Ayuso, evidenciaban la necesidad para el PSOE de cambiar de estrategia, pero también el reconocimiento de que, a medida que avancen los trámites judiciales, la situación empeoraría para los procesados. Y el resultado final sería una agonía mediática que implicaría el agotamiento electoral del PSOE, imposible de compensar -a la vista del aumento desmesurado de la deuda pública española en los tres últimos años y de la negativa de la UE a crear “bonos de deuda europeos”- con la “naturalización” de unas cuantas decenas de miles de inmigrantes. El problema es que, a la vista de lo que se ha publicado sobre estos casos de corrupción, de lo que los medios están investigando en este momento y de lo que el propio Sánchez conoce y que aun no ha salido a la superficie, era imposible afrontar un contrataque eficiente.

Advertisement

2) El último error de Sánchez ha sido precisamente su “carta” en el que amenaza con su dimisión. La carta es hoy primera plana en todos los medios de comunicación europeos que, gracias a ella, además de referenciarla se han visto obligados a explicar lo que está siendo el “Caso Koldo”, el “Caso Begoña”, los avances mediáticos y judiciales, la comisión de investigación del Senado, etc, elementos todos ellos que habrían pasado desapercibidos para la opinión pública europea, de no ser por la dichosa “carta”. Esto hace que, cada vez más, las puertas de la UE se le vayan cerrando al pedrosanchismo. El electorado alemán y, mucho más especialmente, los gobiernos europeos de derecha, empezando por el italiano, van a permitir que llegue a España un solo euro comunitario que tiene muchas posibilidades de ser empleado en no llegar a los destinos para los que ha sido enviado, y perderse en los bolsillos próximos al gobierno español.

  1. La mala situación general económico-social de España. Mientras la UE había habilitado planes de “reactivación” económica posteriores a la pandemia, mientras se podían enmascarar las cifras y alardean de que la economía española “iba como una moto”, trucando incluso las cifras del pero, acallando el descontento social con promesas electorales y la demencial política de inmigración insuflando más y más fondos para la “integración” de los inmigrantes, regando a ONGs mafiosas con más y más millones para que ejecutaran su tarea de “taxis” para aumentar el número de inmigrantes, y mientras una parte de los medios recibía jugosas subvenciones a condición de difundir “beneficios” de las políticas gubernamentales y ocultar las cifras problemáticas (el déficit que ha llegado en marzo de 2024 a 1,6 billón de euros), Sánchez podía mantenerse en la Moncloa. Pero, en los últimos meses, el aumento de la criminalidad -especialmente de los delitos más graves: violaciones, asesinatos y robos con violencia-, la constatación de que zonas del país, en el sur, ya están en manos de las mafias de la droga y de que estas actúan impunemente, ante la mirada indiferente de Marlaska, y por ahí pasa, no solo hachís e inmigración, sino también toneladas de cocaína llegada a Marruecos, el cambio de actitud alemana hacia la entrega de fondos al gobierno español, el malestar por el aumento de una inmigración innecesaria, incontrolada y peligrosa, las molestias insólitas que esto crea en el día a día de la sociedad a causa de sus costumbres culturales y antropológicas que no están dispuestos a renunciar, la demostración de que la cifra de parados está un millón por encima de las cifras oficiales, el hundimiento en la venta de pisos, de coches eléctricos, los intentos del gobierno de controlar más y más empresas del Ibex, etc, etc, etc. Todo ello pinta un cuadro catastrófico del país.

Esto es importante por dos factores:

1) Todo esto, quizás, por separado, pudiera tener alguna solución (ser enérgico en la lucha contra la delincuencia, repatriaciones masivas empezando por inmigrantes que hayan cometido delitos, austeridad en el gasto público, reducción de las dimensiones de la administración, etc), pero juntos son de imposible solución especialmente para un gobierno en minoría y con problemas de autoridad, corrupción, dependencia de socios parlamentarios verdaderos chantajistas. Y, el gran problema es que, antes o después, está situación se evidenciará en toda su crudeza (como ha ocurrido en Argentina: “no hay plata”). El cambio de actitud de la UE en relación a España y el cierre del grifo han marcado ese momento en el que el realismo tenderá a imponerse y los “hombres de negro” exigirán medidas drásticas que afectarán, especialmente, a las pensiones, generando un vuelco en las intenciones de voto.

2) El nivel de la deuda española es tal que no solamente compromete el desarrollo y las inversiones en los próximos años, sino que supone una losa para las futuras generaciones y esto en un país multiétnico en el que los nacidos fuera de España y sus hijos, son ya la cuarta parte del total de la población. Ni en las elecciones generales de 2023, ni en las autonómicas que se están celebrando desde enero, ningún partido -salvo Vox- han hablado de lo que debería ser el primer punto de un programa de gobierno responsable: “reducción del gasto público”. De entre todos los rubros, la estructura autonómica del Estado y el gasto global generado por la inmigración (incluidos los gastos judiciales, policiales, los subsidios, el coste de los MENAS y de su mantenimiento, etc), junto con el dinero que se filtra en las redes de corrupción y la financiación de chiringuitos en forma de ONGs, constituyen las partidas mayores de las que podía prescindirse… si el gobierno tuviera autoridad y voluntad. Pero carece de ambas cosas.

Pues bien, el reconocimiento de todos estos elementos, son los factores que avalan una respuesta afirmativa a la pregunta de si la carta de Sánchez amenazando con dimitir evidencia una voluntad auténtica. Todo lo dicho anteriormente son factores problemáticos y de casi imposible solución y, por tanto, avocan al pedrosanchismo a una larga agonía. El presidente con su carta anunciando que “medita su dimisión hasta el lunes”, no habría hecho otra cosa que reconocer la triste realidad de un gobierno -su gobierno- que ha fracasado estrepitosamente y que deja al país en una situación caótica y polarizada. Ahora bien…

¿SÁNCHEZ VA DIMITIR?

Advertisement

TODO LO QUE AVALA UNA RESPUESTA NEGATIVA

… Dejar las cosas así es no reconocer ni lo que es el pedrosanchismo, ni los rasgos de su dolencia psicológica: un psicópata nunca reconoce sus errores, son los otros los que cometen errores, son los otros los que no le dejan hacer lo que él quiere, son otros los que le impiden realizar su ego. Y, allí donde una persona normal dimitiría, Pedro Sánchez, arrastrado por su conformación mental, tenderá a llegar hasta el final. No es que prefiera “morir matando”, es que prefiere que “muera todo un país, a dimitir”. Desgraciadamente, la democracia electoralista es, más que cualquier otro régimen, aquel que presta más facilidades para que un psicópata llegue al poder. Le permite utilizar su altísima capacidad para la mentira, para encandilar momentáneamente al electorado; apoyado por los medios, transmite un look de sí mismo que es, como el look de todos los psicópatas, artificial y que tarda poco en diluirse. Sitúa su ego por encima de todos los demás, no siente -no puede sentir- ningún tipo de empatía con nadie: ni con su esposa, ni con su partido, ni con su país, ni con sus partidarios. Y si hay rastros empáticos se trata solamente de simulación. Estas pulsiones negativas aumentan desde el momento en que se ve atacado, ridiculizado, insultado, silbado en sus apariciones públicas. Su bilis se multiplica y su odio aumenta. Piensa estrategias para combatir a sus adversarios, pero el psicópata no suele ser muy inteligente: su Ego le impide ver la realidad y actuar razonablemente ante ella.

No creemos, por tanto, que Sánchez vaya a dimitirTodo lo dicho en el parágrafo anterior, valdría para que una persona normal, simplemente, se suicidara (el presidente de Brasil, Getulio Vargas, lo hizo cuando estalló un ínfimo caso de corrupción que aquí no pasaría de un juicio de faltas; el presidente boliviano Germán Bush, así mismo, se suicidó al ver que encontraba dificultades creciente para imponer su proyecto político; incluso en 1993, un correligionario de Sánchez, Pierre Bérégovoy, primer ministro del gobierno del presidente Mitterand, se suicidó al saberse que había recibido un préstamo de un millón de francos para comprarse un apartamento…). Pero estos precedentes no valen para Sánchez. Está hecho de otra pasta.

Así pues, la carta de Sánchez amenazando con dimitir puede estar motivada por cinco intenciones que, en el fondo, son una: la decidida voluntad de aferrarse, con uñas y dientes, al cargo, de situar su ego por encima de los intereses de su partido, de su país y de las generaciones futuras. Estas intenciones son:

1) “Currarse la página de la víctima”.- Se trata de un cambio de estrategia: dado que la campaña del “y tú más”, ha mostrado una eficacia muy limitada; dado el fracaso de su ofensiva contra la presidenta de la Comunidad de Madrid; dada la certidumbre de lo que puede ir apareciendo, Sánchez ha optado por presentarse como víctima: él y Begoña. Sería como uno de esos personajes del cine negro, el “falso culpable” que es perseguido, amenazado, encarcelado, pero que, al final logra demostrar su inocencia. En sus contactos con el independentismo, ha comprobado que el victimismo tiene su público y que, por el simple hecho de presentarse como víctima, él y su pareja se hacen acreedores de apoyo, cariño y ternura.

Advertisement

2) Movilizar voluntades.- La oposición, desde el inicio de la legislatura, aprovechando el asunto de la amnistía a Puigdemont y a los indepes catalanes, ha realizado varias movilizaciones masivas. Sánchez, en todo este tiempo, cada vez que Sánchez ha asistido a algún acto público se ha visto abucheado e insultado: “Por siete votos tienes el culo roto”, no ha sido una excepción, sino la postrera muestra del “fervor popular” que le rodea cada vez que sale de la Moncloa. No hay más abucheos porque la guardia de corps de Marlaska sitúa las barreras para el público a 200 y 300 metros de donde se encuentra el presidente. Era necesario que sus partidarios tuvieran una ocasión de mostrar su apoyo al presidente. Y esa es otra de las cosas que busca: una riada de “adhesiones inquebrantables”.

3) Poner a sus socios ante el abismo.- Con un Puigdemont que repite que tiene “cogido por los huevos” a Sánchez, con una ERC que repite que “el gobierno hace lo que nosotros queremos”, con un Bildu que se jacta del reconocimiento público y el blanqueo que le depara Sánchez, todos los cuales están dispuestos a apoyarle en cada votación siempre y cuando reciban algo a cambio, es evidente que no puede cerrarse, ni los presupuesto de 2024, ni siquiera la legislatura. Por tanto, Sánchez habría decidido plantear un órdago a sus socios: “Si me voy, vosotros caéis también”, “Si me voy, no habrá amnistía”, “Si me voy, la posibilidad del federalismo se aleja para siempre”.

4) Polarizar a la sociedad española.- Este elemento siempre ha estado presente desde el inicio de esta legislatura, pero en su carta, Sánchez lo convierte en uno de los elementos centrales: él es el que cierra el paso a la derecha (“No pasarán”), él es el que defiende el progreso frente a los “extremistas de derecha”, olvidando que, las revelaciones en su contra, una vez más, no han sido difundidas ni por la “derecha”, ni por la “extrema-derecha”, ni por el “fascismo”, sino por medios de prensa independientes y no sometidos a su férula. Sabe que si convence a la sociedad española de que existe una “galaxia fascista” que conspira contra él, es susceptible de obtener el apoyo de la otra parte de la sociedad en forma de izquierdas, nacionalistas e indepes. Una vía peligrosa que conduce directamente a la guerra civil.

5) Impedir un descalabro de la izquierda en las elecciones europeas.- Sánchez piensa en el futuro. Es consciente de que la izquierda europea va a sufrir un revés importante en las próximas elecciones europeas de junio. Si logra que la candidatura socialista mantenga sus posiciones en España, piensa que, así podrá dar el salto a Europa y convertirse en líder de la izquierda europea. Tenía esa ambición en Iberoamérica a través del Grupo de Puebla, pero las constantes derrotas en los dos últimos años de esta opción (que ha perdido el poder en unos países -Argentina, Portugal, Ecuador, Perú, Salvador- y se muestra completamente deteriorada en otros -Chile, Colombia, Brasil-), le inducen a mirar de nuevo en Europa. Y lo está intentando a través de esa “misión” diplomática que se autoarrogado para el reconocimiento del “estado palestino”.

¿SÁNCHEZ VA DIMITIR?

Advertisement

TODO ES POSIBLE EN EL PEDROSANCHISMO

Hace poco decíamos que Sánchez gobierna porque 7.821.000 españoles, de mayores, les gustaría ser como él. Mentiroso, desplazándose en Falcon a comprar tabaco, entre lujos orientales, acumulando patrimonio, sin escrúpulos de ningún tipo, habiendo logrado su proyecto personal por encima de cualquier cosa… Por eso le votan. Sánchez no es un accidente en la historia de España, es el resultado de la entronización de un modelo humano promovido desde los años 80No debe extrañarnos nada de lo que haga o decida. De hecho, no decide él, sino sus vísceras.

Pero la cuestión es si la carta refleja una actitud real o bien es mera simulación.

Tendemos a creer que es ambas cosas a la vez: incluso los psicópatas de manual experimentan momentos de flaqueza, se sienten vacíos, perciben el odio que generan y la situación que les lleva a un callejón sin salida. Algo de todo esto se refleja en la propia carta. Pero, junto a esto, las vísceras de Sánchez reaccionan y aspiran a la “solución final”: o él o el caos. Para seguir debe suscitar entusiasmos en sus partidarios, miedo en sus aliados y salidas de tono en la oposición. Debe conseguir hacer creíble su mensaje, desplazarlo del agujero de corrupción en el que se encuentra su partido y su núcleo familiar, “currándose la página de la pena”.

Se ha dado un tiempo para pensar. En el curso de estos cuatro días, del 25 al 29, veremos las reacciones de los medios y de la sociedad, de sus partidarios y de sus detractores. Pero todo esto servirá de poco: actuará según sus vísceras. Incluso aunque amagara con dimitir, unas horas después podría cambiar de opinión.

Advertisement

Sánchez no necesita asesores, precisa psiquiatras. Y este país también.

 

Ernesto Milá. 

Advertisement
Continuar leyendo