ROMA – Un grupo de vigilancia de la persecución cristiana publicó un informe importante esta semana que relata un aumento inquietante en los crímenes de odio anticristianos en Europa.

El Observatorio sobre la intolerancia contra los cristianos en Europa (OIDAC), con sede en Viena, reveló que los delitos de odio contra los cristianos en Europa aumentaron en un sorprendente 70 por ciento entre 2019 y 2020, con la mayor frecuencia en Francia y Alemania.

El “Top 5 – Informe 2019/2020” de OIDAC, producto de dos años de investigación, se emitió con motivo del Día Internacional de los Derechos Humanos celebrado el 10 de diciembre. El informe muestra “una multitud de incidentes y ejemplos de delitos de odio como vandalismo de iglesias y otras amenazas a la libertad religiosa en cinco países europeos donde identificó los desafíos más severos para los cristianos ”.

El grupo descubrió que las dos principales dinámicas amenazadoras que afectaban negativamente la vida de los cristianos de Europa eran la “intolerancia secular” y la “opresión islámica”.

“Si bien la intolerancia secular es la dinámica impulsora en la mayoría de los casos y áreas de la vida que observamos, la opresión islámica ocurre principalmente en áreas concentradas, en las que los conversos cristianos son el grupo más afectado junto con otros cristianos residenciales”, afirma el informe.

La gente rinde homenaje por la noche frente a la Basílica de Notre Dame el 29 de octubre de 2020 en Niza, Francia. Un hombre armado con un cuchillo atacó fatalmente a personas en la iglesia, ubicada en el corazón de la ciudad. (Arnold Jerocki / Getty Images)

“Este fenómeno puede ocurrir en varias formas, como vandalismo – ataques por motivos antirreligiosos contra iglesias y edificios cristianos – o incluso crímenes de odio anticristianos contra individuos”, dijo la directora de OIDAC, Madeleine Enzlberger.

Enzlberger señaló que el fenómeno también se manifiesta en la progresiva restricción de derechos fundamentales, como la libertad de expresión, la libertad de religión, la libertad de conciencia, la libertad contractual y la patria potestad.

Al preparar el informe de 60 páginas, OIDAC se centró en los 5 países de Europa con más problemas y conflictos sociales que afectan los derechos y libertades de los cristianos, a saber: Alemania, Francia, España, Suecia y Reino Unido.

Subrayó lo que sus autores llaman una “dinámica de secularización infundida ideológicamente que ha provocado un cambio cultural en todos los niveles de la sociedad, ya que intenta relegar la religión a la esfera privada e ignora el hecho de que la fe juega un papel vital en una sociedad sana”.

Gran parte de la hostilidad hacia el cristianismo proviene de “una fuerte y, a veces, incluso extrema oposición a la moral cristiana derivada de creencias fundamentales”, dijo.

En esta fotografía de archivo del 5 de octubre de 2020, se observa a personas antes del juicio de Sidi Ahmed Ghlam, un argelino de 29 años acusado de matar a una mujer e intentar volar una iglesia cerca de París. (Foto AP / Francois Mori, archivo)

Regina Polak, profesora de Sociología de la Religión en la Universidad de Viena, llamó la atención sobre la falta de información sobre los crímenes de odio anticristianos en Europa durante el lanzamiento del informe esta semana.

“El número de crímenes de odio anticristianos denunciados en la Región de la OSCE, en particular el vandalismo contra lugares de culto, la profanación de cementerios y ataques incendiarios contra iglesias, es preocupante”, dijo Polak. “Este es un llamado a la acción integral, en primer lugar, apoyando a las víctimas, promoviendo medidas de sensibilización e investigación”.

Enzlberger afirmó que la presentación de los hallazgos de OIDAC tiene como objetivo, en parte, contrarrestar el creciente analfabetismo religioso entre políticos, funcionarios y periodistas, así como la ignorancia generalizada sobre la amplitud del problema de la persecución anticristiana.

“A menudo, la intolerancia secular es impulsada por grupos ideológicos y radicales y no debe confundirse con el concepto razonable de laicidad”, dijo Enzlberger. “La intolerancia secular no solo es hostil hacia la religión, sino que también amenaza la neutralidad garantizada del estado hacia la religión”.