Sorprendentemente, y como excepción al comportamiento estúpido y bovino de los integrantes del Partido Popular, el regidor de la Capital Pucelana ha mostrado una pequeña muestra de decencia y orgullo patrio.
“Mientras sea alcalde, lo único que figurará en el balcón del Ayuntamiento serán las banderas oficiales: la de la ciudad, la de la Junta y la nacional”, ha expresado a los medios de información cuestionado por qué hará el Ayuntamiento tras la sentencia del Supremo conocida hoy que avala la colocación de estas enseñas en las fachadas de edificios públicos.
Sobre esta polémica, que se ha suscitado durante varios años en la ciudad en edificios como el del Ayuntamiento, la Diputación provincial o las Cortes de Castilla y León, el alcalde ha cerrado del todo la puerta a que el año que viene el consistorio cuelgue la enseña LGTBI en su balcón por el Orgullo: “No en Valladolid”, ha apostillado Carnero.
El Tribunal Supremo ha avalado que se cuelgue la bandera arcoíris LGTBI en los edificios públicos durante la celebración del Orgullo al entender que no es un “símbolo de significación partidista” ni “propugna ningún tipo de enfrentamiento”.
La Sala de lo Contencioso-Administrativo del Supremo ha sentenciado que la Diputación de Valladolid y el Ayuntamiento de Zaragoza no incumplieron la ley que regula el uso de las banderas al colgar la arcoíris en el patio interior, en el primer caso, y en el balcón, en el segundo.