Connect with us

España

Gerard Bellalta, empresario: “Estoy avergonzado de ser catalán y harto de vivir en Cataluña”

Avatar

Published

on

Gerard Bellalta, rodeado de patriotas catalanes, en la plaza de Cataluña
¡Comparte esta publicación!

Gerard Bellalta*.- Tengo 57 años. Soy empresario y pertenezco a una familia cuyo origen catalán se sumerge en el siglo XVII. Mis antepasados lucharon junto a Ramón Cabrera i Griñó en el bando carlista y también con el general Franco en la guerra contra el comunismo. He trabajado duro desde muy temprana edad. Tengo una gran mujer y dos hijas maravillosas. Soy catalán de nacimiento y de origen; sin embargo, debo decir, no sin dolor, que hoy me avergüenzo profundamente de serlo y también muy cansado de vivir en Cataluña.

Estoy muy harto de tener que convivir a diario con catalanes que odian profundamente a los que pensamos de forma distinta. Estoy harto de puigdemontes, orioles, colaus, fachines, pujoles, torrentes, junqueras, terribas, laportas, guardiolas, roviras, gabrielas, raholas, traperos, okupas, manteros, cuperos, yihadistas y demás gentuza que en Cataluña degrada tanto la condición humana.

Estoy harto de que el Gobierno de España deje sin respuesta los permanentes actos de insurrección que se producen a diario en todas las ciudades catalanas. Estoy harto del abandono sometido durante años a los catalanes que hemos sido siempre fieles a España.

Estoy harto de que me roben los políticos catalanes y que ese dinero vaya a parar a la gente demasiado perezosa para ganarlo.

Advertisement

Estoy harto de que me digan que el movimiento separatista es pacífico, cuando todos los días me llegan decenas de historias de catalanes que son ofendidos, agredidos, amenazados, boicoteados… por no someterse a los dictados ni aceptar el relato mentiroso de los secesionistas.

Estoy harto de los supremacistas catalanes y de aquellos que, para reivindicar su catalanidad, han renunciado a sus raíces procedentes de otros puntos de España, con gran olvido de lo que son.

Estoy harto de lazos azules, de insultos a España, de mossos que no sirven por igual a todos los catalanes, de periodistas mercenarios que desinforman deliberadamente, de docentes que enseñan a los niños a interiorizar el odio a España, de los radicales que han tomado el control de nuestras calles, de los políticos que han echado un pulso al Estado con la connivencia y el dinero del mismo Estado.

Estoy harto de que todos nuestros errores y fracasos sean siempre culpa de otros y nunca de nosotros mismos. Estoy harto de que no aceptemos nuestras muchas taras morales.

Estoy harto de que utilicen nuestro dinero para financiar medios de comunicación que predican el odio contra los catalanes que nos sentimos profundamente españoles, por convicción y por principios.

Advertisement

Estoy harto de la inmersión lingüística. He tenido que matricular a la menor de mis hijas en un centro de enseñanza privada para que conozca la lengua de Cervantes y tenga las oportunidades fuera de Cataluña que la lengua catalana no le ofrecerá nunca.

Estoy harto de que me digan que el derecho a decidir de dos millones de catalanes debe imponerse al deseo de cuarenta millones de españoles de permanecer unidos.

Estoy harto de escuchar a los políticos separatistas hablando mal del resto de España, cuando sabemos que le debemos todo cuanto hemos sido.

También estoy malditamente harto de que se acuse a España de robarnos, sobre todo cuando los que nos han robado han sido los políticos separatistas que hoy proclaman el desorden y la rebelión, porque no tienen nada que perder.

Estoy harto de que los funcionarios catalanes alineados con el separatismo aparenten ser el mejor ejemplo de compromiso con nuestra gente. Estoy harto de que gente que no ha emprendido nunca nada ni pagado una sola nómina, hayan construido el relato de una Cataluña de buenos y malos.
.
Estoy harto de los catalanes lobotomizados, que son una masa inerte enferma de odio, pero profundamente cobarde. Estoy harto de que se escondan tras los periodistas extranjeros y que cuando tienen que jugársela, deciden huir de la justicia. Estoy harto del permanente relato victimista, que se tergiverse la historia; que se ignore, por ejemplo, que cuando Franco venía a Cataluña, los líderes catalanes acudían rastreramente al palacio de Pedralbes a rendirle pleitesía y los obispos catalanes lo sacaban bajo palio en Montserrat.

Advertisement

Estoy harto de que se caricaturice permanentemente a España, que se la dibuje como un país culturalmente atrasado, cuando los catalanes no tenemos una solo acontecimiento popular que nos sirva de atracción turística, como por ejemplo lo es Sevilla en su Feria de Abril, Valencia en sus Fallas, Málaga en su Semana Santa, Huelva en su Rocío o Pamplona en sus Sanfermines.

Estoy harto de que se menosprecien las tradiciones españolas y que luego copiemos sus ferias, charangas y romerías.

Estoy harto de los hipócritas antitaurinos catalanes que acuden a las principales ferias taurinas del resto de España.

Estoy harto de que nos sintamos superiores cuando el genio creativo hace tiempo que lo perdimos. Estoy harto de que hablemos mal de todo el mundo, de que hagamos mofa de las costumbres de otras regiones, cuando nuestros bailes, nuestros trajes regionales, nuestra cultura de calle, carece de interés salvo para nosotros mismos.

Estoy harto del desprecio a los andaluces, cuando no consta que nuestros compatriotas del sur recurran a las sardanas para amenizar sus fiestas, como nosotros recurrimos a su folclore para amenizar las nuestras.

Advertisement

Estoy harto de que nos creamos el ombligo del mundo cuando no tenemos un solo símbolo cultural e identitario por el que se nos reconozca fuera de España.

Estoy harto de los curas y obispos que respaldan en las homilías a los que ayer quemaban sus templos.

Estoy harto de que las familias y los amigos no podamos reunirnos civilizadamente sin que las diferencias políticas marquen el desarrollo de la velada.

Estoy harto del fanatismo de miles de catalanes, que interpreten como una victoria lo que no ha sido sino una gran derrota, que se dejen engañar como niños, que consideren héroes a los representantes de la casta más ladrona y corrupta de España.

Estoy harto del escaso valor que tiene la palabra dada en Cataluña, de que hayamos acabado con el seny, de que la desmemoria nos impida reconocer nuestras complicidades históricas con esclavistas, terroristas y oligarcas usureros, del cobarde victimismo del separatismo, de que media Cataluña odie a la otra media, de que nuestra adhesión a España haya dependido siempre del dinero recibido. Estoy harto de los empresarios catalanes que ayudaron a Franco a ganar la guerra y que luego se alinearon con el separatismo. Estoy harto de que el voto de la Cataluña rancia valga el triple que el de un barcelonés.

Advertisement

También estoy harto de que pocos catalanes se enfrenten a la realidad de una región que, antes de 50 años, será mayoritariamente musulmana.

Sí, estoy terriblemente harto de lo que muchos catalanes están haciendo. Estoy profundamente avergonzado de ser catalán y muy harto de vivir en Cataluña.

Lo lamento por mis hijas. Lamento que se vayan a encontrar con una Cataluña mucho peor que la que nosotros heredamos. Gracias a Dios que aún nos queda el resto de España para liberarnos de este infierno, del que estoy cada día más harto.

*Empresario y presidente del Círculo de Empresarios de Tabarnia

Advertisement
Advertisement
2 Comentarios

1 Comentario

  1. Avatar

    ana sanchez

    07/07/2019 at 14:32

    Excelente articulo

  2. Avatar

    ana sanchez

    19/09/2018 at 10:06

    Excelente articulo

Escriba una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

España

Cartas desde Colombia: Librería Europa, un símbolo; Pedro Varela, un referente de lo que la Hispanidad y Occidente representan

Avatar

Published

on

¡Comparte esta publicación!

Por Carlos Arturo Calderón Muñoz.-

A inicios de la década de los 2000 este chicuelo caminaba por el centro de Bogotá, lugar en el que siempre pareciera que algo mágico está a punto de pasar pero en el que la caprichosa realidad se impone sin resistencia. Estaba buscando la Editorial Solar, extraño negocio ubicado a unas calles del principal centro de la masonería en Colombia; un recinto rodeado por una sociedad que nunca se entera de su propio drama, pero en cuyo interior se escuchaban acertados análisis geopolíticos. De entre los aromas de esoterismo andino y revisionismo histórico siempre emergían comentarios acerca de una librería con nombre de viejo continente.

En la lejana Barcelona, algún loco llamado como un apóstol con oficio de Papa, había leído tantos libros que un día, en medio de su delirio, decidió contener el avance de la realidad con una muralla de papel; respondiendo al fuego de la maquinaria globalista con letras destinadas a la censura. La lealtad a su sangre le impedía suscribirse a tratados de rendición, pues esa no es costumbre española y capitaneando una empresa que sólo se financiaba de su propia fe logró mantener una quimera por décadas.

Ese caballero andante, que deambula por caminos de tinta y bits, no es más que un viejo que contamina a las juventudes con fantasías seniles. Va por ahí hablando, y peor aún, enseñando con su ejemplo, de ridiculeces como el honor, lealtad, austeridad, marcialidad, el triunfo de la voluntad y otras cosas sin valor alguno. Porque gracias a dios nosotros conocemos el dinero y si se habla de un artículo que éste no puede comprar seguramente no existe.

Advertisement

¿Por qué alguien renunciaría a amasar una fortuna que le permita satisfacer a los sentidos? ¿En qué momento alguien se aleja del goce sensual para escuchar al rojo que surca por sus venas y por extensión a la divinidad que este representa? Un simple librero sin recursos económicos o linajes políticos se ha vuelto tan problemático para las fuerzas de un sistema que gobierna todo un planeta, que le han tenido que agredir, enjuiciar y encarcelar en múltiples ocasiones. ¿Quién es ese sujeto tan peligroso? ¿Eres tú Pedro?

Con la fuerza de las leyes, más no de la justicia, el señor del mundo ha logrado capturar el bastión que ese quijote contemporáneo defendiera por un cuarto de siglo. Hace tan sólo unos días, alrededor de un centenar de agitadores a sueldo de la finanza internacional representada por Soros, gritaban con odio “Refugiados sí, españoles no”. Esas palabras se dirigían a Manuel Canduela y algunos miembros de Democracia Nacional, quienes protestaban, muy cerca de la ya caída librería, por los atropellos cometidos contra el editor y algunos políticos.

Muy probablemente esos extremistas endofobicos no se imaginan que para muchos hispanos, desde Estados Unidos hasta Chile, incluido el que esto escribe, ese librero, al que le dio por llamarse Pedro Varela, es un referente inequívoco de lo que la Hispanidad y Occidente representan. Es una fantasía de carne y hueso que demuestra que un sólo hombre, que haya hecho de su honor la lealtad, es capaz es de transformar al mundo. Ese pequeño establecimiento, castillo casi inexpugnable de autores malditos, se convirtió en una luz tan potente que nos deslumbró al otro del atlántico.

Conferencia de Pedro Varela en Castellón.

Conferencia de Pedro Varela en Castellón.

 

Advertisement

 

 

 

 

 

Advertisement

 

 

 

 

Para nosotros, muchos de los cuales nacimos el mismo año que la denominada Librería Europa, Pedro Varela es un ejemplo de ese estado de consciencia al que se llega cuando se mezclan porciones equivalentes de heroísmo y locura, eso a lo que llaman amor. Porque como toda encarnación del arquetipo de la hispanidad sólo puede decir que el amor no engendra cobardes y al nacer en este planeta prisión, no ha hecho más que arrebatarle plazas a la desesperanza para convertirlas en fortalezas de las que pueda emerger un mejor mañana.

Advertisement

Oponiendo libros a finanzas nos ha demostrado que los Rothchilds, Rockefellers, Soros y demás ralea usurera, son en realidad patéticos acobardados que aman el oro porque al cubrirse con este pueden fingir una nobleza que no tienen. Se aferran con desespero a ese metal porque ellos mismos son incapaces de transmutar su ser en algo más grande. Don Pedro, guiado por la memoria de la sangre e impulsado por la voluntad ha sobrepasado los límites de su materia. Ahora, cuando la Librería Europa ha desaparecido, y aún si su biología fuera asesinada, él no ha sido derrotado. Ya se convirtió en un símbolo para miles de nosotros y nos aseguraremos de que la siguiente generación retome el testigo de nuestra luz como pueblo. Aún si eso implica que el último reducto de los hispanos en las Américas tenga que reconquistar una península ibérica en la que ya no existan españoles.

Sé que muchos de los que de esta parte del mundo llegan a España lo único que quieren es dinero, en este caso en particular no soy la excepción. Quisiera pedirles a todos los que esto lean que, por favor, no comenten el artículo, no le den “me gusta” o asientan en el silencio en su casa. Pedro Varela ha dado mucho por la superviviencia de Occidente y en este momento podemos, con pequeñas acciones, ayudarle a continuar. En la red es fácil encontrar las cuentas bancarias a las que podemos enviarle un auxilio a don Pedro en este momento de apremiante necesidad.

Fachada de la librería Europa.

Fachada de la librería Europa.

 

 

Advertisement

 

 

 

 

 

Advertisement

 

 

 

Por favor, ahórrense lo de una noche de tapas en el bar, pospongan por unos meses ese nuevo celular o desvíen una parte del dinero que quieren donarle a los pobres indígenas de Colombia y dénselo a este hombre, con el mismo amor con el que él ha entregado su vida por Occidente.

En lo que a mí respecta, no me importa lo que diga la Colau, la calle Séneca va a ser lo primero que visite cuando vaya a Barcelona, porque es ahí donde culmina ese puente de literatura que se conecta con las cumbres andinas de una infancia bogotana.

Advertisement

Muchas gracias don Pedro, siga siendo luz.

*Desde San Bonifacio de Ibagué (Colombia)

Continuar leyendo
Advertisement
Internacional2 horas ago

¡Viva la democracia! Alvise Pérez, candidato al Parlamento Europeo, nos da una EXCLUSIVA TERRORÍFICA

¡Comparte esta publicación!   El nuevo Alcalde de Brighton & Hove, Reino Unido, implementará medidas “acordes al respeto y decoro...

España6 horas ago

Cartas desde Colombia: Librería Europa, un símbolo; Pedro Varela, un referente de lo que la Hispanidad y Occidente representan

¡Comparte esta publicación! Por Carlos Arturo Calderón Muñoz.- A inicios de la década de los 2000 este chicuelo caminaba por...

España2 días ago

Viva la democracia española. El librero Pedro Varela podría pasar 12 años en prisión por vender libros que no gustan a la canalla roja prohibicionista

¡Comparte esta publicación!   Su delito: discrepar de la versión oficial y tener sus propias opiniones, tras años de investigación...

España3 días ago

Tendremos que estudiar detenidamente a los asistentes: BILDERBERG elige MADRID como centro de su próxima cumbre “secreta” de 2024

¡Comparte esta publicación! Cristina Martín Jiménez.- El Club Bilderberg elige Madrid para su reunión secreta de 2024. Será su tercera...

España4 días ago

Íker Jiménez: el último periodista vivo. El único profesional de la información de defiende la LIBERTAD de expresión

¡Comparte esta publicación! La libertad de expresión es un derecho esencial en España, pero se convierte en una ‘peligrosa’ arma cuando...

Internacional5 días ago

Aplaudan la “libertad democrática” de Occidente: Dirigente AfD en Alemania recibió una multa por denunciar que los inmigrantes africanos violan mujeres… Y Elon Musk no da crédito

¡Comparte esta publicación! La política alemana del partido AfD, Marie-Thérèse Kaiser, fue condenada y multada por más de 6.000 euros....

Advertisement Enter ad code here