¡Comparte esta publicación!
Una de las críticas que comúnmente le hacen a VOX es que no tiene un programa económico consolidado. Sin embargo, a cinco días de las elecciones generales de España ya es claro que no hay un partido político que presente una propuesta económica tan liberal como la de esta colectividad.
La propuesta estrella es la reducción del IRPF (Impuesto sobre la Renta de Personas Físicas). En este momento, este impuesto cuenta con cinco tipos, 19%, 24%, 30%, 37% y 45%. VOX propone no solo simplificar, sino también rebajar.
La propuesta del partido es tener solo dos tarifas, los trabajadores que ganen menos de 12.000 euros no pagarían impuestos. Quienes ganen entre 12.000 y 60.000 euros pagarían 22%. Por encima de los 60.000, tendrían que pagar el 30% de su renta. Esto quiere decir que el 97% de los contribuyentes pagaría el 22% si se aplica la propuesta de VOX.
VOX también le apuesta a bajar impuestos a las empresas. Propone bajar el Impuesto de Sociedades del 25% al 22%. Esa sería la primera fase, el objetivo final propuesto por el partido de Abascal es dejarlo en 12,5%, al nivel de Irlanda, uno de los países más amigables con los empresarios en esta cuestión.
La intención de su programa, según dicen, es fortalecer el poder adquisitivo de los españoles y empujar la actividad económica. Por eso, además de bajar los impuestos proponen recortar el gasto público con un programa de ajuste valorado en 24.000 millones de euros. Con dicho ajuste, el partido busca “restaurar la solidez de las finanzas públicas, eliminar el déficit y reducir la deuda, paso previo para reducir los impuestos, liberalizar los mercados y reformar el Estado del Bienestar”.
Esto quiere decir que mientras el PSOE habla abiertamente de llevar el gasto público al 46% del PIB y el PP plantea dejarlo en 41% -en donde está ahora-, Vox propone trabajar para que el peso del Estado caiga al 35% del PIB.
VOX también le apunta a la liberalización del mercado laboral. Dicen que trabajarán en la posibilidad de que se den acuerdos individuales entre trabajador y empresa, de modo que ambos puedan zafarse del convenio vigente en el sector. Además, quieren modificar la Ley de Huelga para dar garantías a los trabajadores que no participen en los paros y para eliminar los incentivos de participar acciones violentas convocadas por estas asociaciones que se han convertido en colectivos extorsionistas.
El partido de derecha propone acabar con las subvenciones a partidos políticos y sindicatos. Y, por último, VOX también tiene un plan para privatizar empresas estatales, por ejemplo, quiere privatizar todas las televisiones y emisoras de radio públicas.
Con estos puntos, VOX oficialmente se convierte en el partido más liberal de España en materia económica.
