El Gobierno estaba al tanto de los riesgos del coronavirus días antes de autorizar (y alentar) las manifestaciones del 8-M. Ahora, en un vídeo recuperado de aquel momento se observa cómo desde la cabecera socialista se oye una orden clara: «No se besa». Es decir, el Gobierno desaconsejaba el contacto social mientras se metía en una marcha que reunió a unas 120.000 personas por las calles de Madrid.
De aquella manifestación, y de aquella cabecera, terminaron contagiadas Begoña Gómez, mujer de Pedro Sánchez, la vicepresidenta Carmen Calvo y la ministra Carolina Darias. Además, tal y como constatan los datos de Sanidad, Madrid cuadruplicó el número de hospitalizados por coronavirus justo cinco días después de la manifestación del 8-M. La imprudencia del PSOE y su falta de transparencia con respecto al brote que acechaba ya el país tiene en este vídeo un nuevo capítulo.
Desde hace horas las redes sociales critican la incongruencia de un Gobierno que, mientras aconsejaba no besarse, permitía que miles de personas hablaran y gritaran consignas apelotonadas por las calles de Madrid.
Utilizamos tecnologías como las cookies para almacenar y/o acceder a la información del dispositivo. Lo hacemos para mejorar la experiencia de navegación y para mostrar anuncios (no) personalizados. El consentimiento a estas tecnologías nos permitirá procesar datos como el comportamiento de navegación o los ID's únicos en este sitio. No consentir o retirar el consentimiento, puede afectar negativamente a ciertas características y funciones.