Es más; no se permite hablar de ninguna otra cosa. Hemos olvidado a Puigdemont, las elecciones, Marlaska, Sánchez, sus gorrillas veraniegas, la subida del IPC, y por supuesto, las corruptelas que parecen una nueva versión -extendida y aumentada- de las Mil y una noches.
Aquí, lo importante, es la poligonera y el macarra. O el poligonero y la macarra, no seamos sexistas.
Escuchen la reflexión de Armando Robles, director de Alerta Digital:
Tormenta
29/08/2023 at 01:46
Por qué la chica no le pegó unas buenas bofetadas?