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El empresario catalán Gerard Bellalta ha denunciado la tarea de desprestigio contra España que llevan a cabo los representantes del Gobierno de Cataluña y asegura que el “problema del separatismo” se ha enquistado de tal forma que solo podría resolverse con una acción de fuerza por parte del Estado. Bellalta alude así a las manifestaciones del conseller de Acción Exterior de la Generalitat, Alfred Bosch, que pidió ayer disculpas al gobierno mexicano por la conquista española de la que se cumplen 500 años.
El ministro de Asuntos Exteriores en funciones, Josep Borrell, ha dicho este jueves que el conseller de Acción Exterior de la Generalitat, Alfred Bosch, “no tiene sentido del ridículo”. Bellalta califica esta respuesta como una muestra más de “la tibieza que los gobiernos deEspaña han mantenido siempre con los separatistas”.
Bellalta propone sustituir los “paños calientes” con los separatistas por una “acción enérgica contra ellos”. “Estamos hartos de que el Gobierno de España deje sin respuesta las provocaciones de esta gente. Estamos hartos del abandono sometido durante años a los catalanes que hemos sido siempre fieles a España. Estamos ya hartos de lazos azules, de insultos a España, de mossos que no sirven por igual a todos los catalanes, de periodistas mercenarios que desinforman deliberadamente, de docentes que enseñan a los niños a interiorizar el odio a España, de los radicales que han tomado el control de nuestras calles, de los políticos que han echado un pulso al Estado con la connivencia y el dinero del mismo Estado. No nos están dejando otra salida que echarnos al monte”, manifestó.
Bellalta va más lejos al referirse a los gustos sexuales de muchos secesionistas, asegurando que “pagan a inmigrantes africanos para que se calcen a sus mujeres”. E inquirió: “¿Alguien se ha preguntado por qué en los municipios con un elevado porcentaje de separatistas son donde nacen menos niños autóctonos?”.
Por último, Bellalta critica por igual a todos los partidos nacionales con representación parlamentaria. «Del PP y PSOE no cabe esperar nada. De la basura de Podemos, mucho menos. Vox está siendo una mala copia del PP y Ciudadanos no es más que un partido de liberales que sigue a rajatabla las instrucciones de Bilderberg”.
