Opinión

De diana a proyectil, por Violeta Narino

Published

on

¡Comparte esta publicación!

            Estamos acostumbrados a ver, en algunos países no democráticos el uso de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado como instrumentos represivos del gobierno. Tenemos el ejemplo de Cuba o Venezuela, en el que están consiguiendo que un porcentaje del pueblo se convierta en cooperador necesario de ese “sinsentido socialcomunista-personalista” ¿Qué pasa con España?

            Parece que las filias y fobias hacia el Cuerpo Nacional de Policía y la Guardia Civil viene desde tiempos de Franco. Quizá, antes de continuar con mi exposición, deba aclarar que la policía armada – ahora CNP – tenía plena autoridad de actuación ante cualquier intervención. No es tan sencillo como parece. Si, tenían libertad para obrar como considerasen necesario, pero dentro de un marco legal y unas restricciones bastante severas para ellos. Eran policías 24/7 y debían estar siempre disponibles en su vida privada: no podían emborracharse, frecuentar sitios de “mala nota”, alternar a deshoras, los juegos de azar, es más, eran castigados si incurrían en morosidad.

Los castigos eran distintos: por una falta leve, iban directos al calabozo del propio acuartelamiento; por algo mas grave, tenían arresto y juicio militar ya que no podían ser juzgados civilmente. Cuando detenían a alguien, tampoco asistían a juicios de reos como testigos ni como nada. Aunque el juez podía llamarlos para solventar cualquier tipo de dudas.

            ¿Hubo represalias tras la guerra civil? ¿Existieron las torturas policiales? Hay tantas versiones como personas. Desde mi punto de vista, la policía está compuesta por personas, eso hace que haya quien falle ¿Eso da derecho a criminalizar a todos?

Advertisement

            Su nombre cambió en plena transición (1978) por “Cuerpo de Policía Nacional”. No solo cambiarían su nombre o su estatus a civiles, también se convirtieron en un instrumento político. Como un veterano de este cuerpo contempla:

“Hoy por hoy, nos sentimos un instrumento político. Con este último gobierno. Hasta ahora, dependíamos policialmente de los jueces y orgánicamente del gobierno, porque éramos policía judicial, aunque nos llamen policía nacional. El propio DAO reconoció que estábamos para <<amortiguar los golpes hacia el gobierno>>. La prueba de que han politizado a la policía es que cambian los mandos. Esto ocurre desde Felipe González, aunque, al principio, no ocurría tanto.”

            Estamos en un momento en el que está en duda de la integridad de algunos cargos de la policía o guardia civil, hay quien también dice que “el honor es la principal divisa del Guardia Civil, debe, por consiguiente, conservarlo sin mancha. Una vez perdido, no se recobra jamás.”

            ¿Hasta qué punto estamos dejando que las corrientes criminalicen a personas que hacen una oposición para, por vocación, guardar nuestra seguridad?

Aunque de manera velada, estamos escuchando cada vez más casos de suicidios dentro de estos cuerpos. Tuve la oportunidad de preguntar a alguien bastante ducho en este tema dentro de la guardia civil y su respuesta me dejó helada

“el problema es que los psicólogos son militares… comandantes o tenientes coroneles y, la gente, ¡cómo va a abrirse y a explicar sus problemas a un mando! Deberían ser civiles. Además, la presión es mucha. Tres amigos míos se pegaron un tiro en su destino, una lástima. Y sus mandos directos no veían el problema porque solo se preocupan de que tienen que hacer que trabajes y no ven más allá. De verdad, es una lacra, cada poco, uno… El otro día, un capitán, al parecer se lanzó al vacío… en fin, muy triste ¡Y no arreglan nada!”

            Mientras tanto ¿a qué juegan nuestros personajes electos? Prometen una equiparación salarial que parece que no termina de llegar. Aún no han recibido ese tercer tramo prometido en enero, no sólo eso, “el ninguneo es total… prometen cosas que no cumplen. La productividad llega a los mandos de arriba, al que está en la calle todo el día, no le llega nada, ¡Oficinistas! ¡a esos, si!” ¿Dónde están los “Táser”? Ambos cuerpos han recibido formación en algunos de sus grupos, pero nada más. Ya ocurrió algo similar con las defensas eléctricas en 1985 “nos dieron 50 en San Sebastián, duraron poco. No tenían calidad y su uso era simbólico.”

Advertisement

            Parece que da igual que sindicatos, como Jusapol o AUGC, presionen y salgan a la calle a protestar. Todo va bien si el señor Marlaska tiene sus momentos de esparcimiento comiendo hamburguesas, aunque Barcelona esté ardiendo por, entre otros, los CDR. No importa. ¿Qué es una ciudad arrasada, unos ciudadanos atemorizados, unos policías exhaustos si este señor necesita comerse una hamburguesa? No vaya a ser que por coger un sándwich de la máquina y comerlo en su despacho, mientras intenta solucionar uno de los mayores problemas nacionales que hemos tenido en los últimos años, le dé un “parraque”, ¡por favor! ¡qué exigente es la ciudadanía y que señoritos esos policías que solo reciben una pedrada o un “disparico” de nada!

            ¡Eso sí! Vamos a rebajar las penas por “delito de atentado a agente de la autoridad”, que estos pobres delincuentes tan adorables, no tienen suficiente con las paguitas del gobierno y, como mucho, los multaremos con 150€ dejándolo en una infracción administrativa.  Como bien me comentaron

“nos ataron las manos. Ya, de por sí, hay que tener cuidado extremo en las actuaciones con los ciudadanos… pero, es que ¡Te van a hacer frente y casi no puedes defenderte!”.

            Contando con lo expuesto anteriormente y con la imagen que tratan de dar de nuestros ángeles guardianes durante esta pandemia ¿Nadie se da cuenta que tenemos, si no la mejor, una de las mejores policías mundiales? ¿Represión? Represores son los cuatro pazguatos que se dejan embelesar por promesas que jamás llegarán y ayudan a ese adoctrinamiento con refuerzo negativo. La mayoría de nuestros custodios son gente de bien, sensible, padres, madres, hijos, hermanos ¡por supuesto alguna vez dan un porrazo a alguien! ¿Nadie se lo merece? Por supuesto, quien se lo lleve, no dará nunca la razón a la cordura. “Señores” políticos, dejen de tratarnos de tontos e intentar enemistarnos con quienes nos protegen a todos, incluyéndolos a ustedes. “Señor” Marlaska, no solo se necesita un estómago lleno para dormir bien, también una conciencia tranquila, en muchos supermercados venden infusiones relajantes bastante efectivas.

Para terminar, quiero dar las gracias a nuestras FFCCSE. Gracias por ser la última barrera hacia el caos. Jamás recibiréis todo lo bueno que os merecéis.

Advertisement

Escriba una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Salir de la versión móvil