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La portavoz adjunta coordinadora de Comisiones del Grupo Parlamentario Popular, Belén Hoyo, ha denunciado que “el Gobierno del PSOE ha optado por imponer su modelo educativo sectario de extrema izquierda, en lugar de trabajar por un diálogo para conseguir un pacto educativo”.
En este sentido, la dirigente popular ha recordado que “el Ejecutivo de Sánchez ha atacado de manera descarada la libertad de enseñanza y los centros concertados, ha consentido que en la Comunidad Valenciana, baleares y Cataluña se adoctrine sin ningún pudor y ha permitido que los nacionalistas y los independentistas sean los que decidan en qué lengua tienen que estudiar los niños y ha hecho desparecer el mérito y el esfuerzo del sistema educativo, ha intentado reducir los centros de educación especial”.
Por todo ello, Belén Hoyo ha considerado que “la mejor contribución que podría haber hecho la ministra de Educación a España es que se hubiera ido de la mano de los ministros dimitidos, Montón y Huerta”.
En su pregunta a la titular de Educación en la sesión de control al Gobierno en el Pleno del Congreso, la portavoz popular ha hecho el siguiente balance la gestión del Ejecutivo: “ocho meses de chapuzas, de negligencias y cesiones a populistas e independentistas”.
Algo que ha provocado, según Hoyo, “que lejos de resolver alguno de los graves problemas del sistema educativo español, se hayan profundizado en ellos”.
Esto se ha producido, entre otras cosas, porque el Ejecutivo “ha utilizado y abusado de las instituciones a su antojo, ha antepuesto los intereses del Gobierno al interés de las futuras generaciones de España”. “Solo les ha faltado incorporar el libro de Sánchez, Manual de Resistencia, al currículum escolar”, ha ironizado.
Por todo ello, ha concluido, “el GPP tiene muy claro que los españoles dentro de dos meses dirán no a la contrarreforma educativa del PSOE”.
