Europa
Los niños europeos, devorados por el maltrato
Espeluznante. Horrible. Tremendo.
Carecemos de los suficientes adjetivos para calificar el vídeo que hemos obtenido hace unas pocas horas. Ningún padre, ninguno, en todo el Occidente civilizado, debería ser testigo de cómo un hijo de 7 años, que acude correctamente todos los días a su escuela, le dice a su madre llorando, pero tiernamente convencido, que en realidad el lo que quiere es morir, morir de una vez, y reunirse y ser uno con el Buen Dios.
Porque un niño mucho mayor que él lleva pegándole diariamente desde hace años. Todos los días. Uno tras otro.
Charly es un pequeño de 7 años, francés, que vive en un lugar de recuerdo para toda Europa: Verdún. Pero ayer este pequeño ya no pudo aguantar más: fue testigo de cómo ese pequeño acosador y torturador la emprendía a golpes con su hermano más pequeño -desconocemos la edad, pero es que Charly solamente tiene 7 años- y al fin, por sugerencia de su hermano mayor, aceptó contar ante la cámara y ante las redes sociales lo que le estaba pasando. Lo que estaba sufriendo. Charly apenas puede aguantar las lágrimas.
Pero Charly las aguanta. Tiene mucha práctica en soportar el dolor, el pequeño Charly. Lleva años soportándolo diariamente.
El Buen Dios con el que quería reunirse posiblemente ha considerado mejor dejarlo un poco más con sus padres. Gracias sean dadas por ello.
Ramiro
07/07/2019 at 13:37
¿Y qué hacen LOS MIERDAS DE PROFESORES Y PERSONAL DEL CENTRO “educativo”?
¿Es qué no veían nada, o es que preferían mirar para otro lado, con tal de no ver nada?
Seguro que si fueran sus hijos, harían algo.
En estos casos, hay que expedientar y cesar en sus puestos a todo EL EQUIPO DIRECTIVO DEL CENTRO CORRESPONDIENTE.
Y, en su caso, imputarles penalmente.
Ramiro
19/11/2018 at 19:02
¿Y qué hacen LOS MIERDAS DE PROFESORES Y PERSONAL DEL CENTRO “educativo”?
¿Es qué no veían nada, o es que preferían mirar para otro lado, con tal de no ver nada?
Seguro que si fueran sus hijos, harían algo.
En estos casos, hay que expedientar y cesar en sus puestos a todo EL EQUIPO DIRECTIVO DEL CENTRO CORRESPONDIENTE.
Y, en su caso, imputarles penalmente.