Colaboraciones

Comunicado de la ex diputada de Vox Malena Contestí

Published

on

¡Comparte esta publicación!

Malena Contestí.- Hace casi dos años di el salto a la política cofundando ACTUA, con la ilusión de poder defender activamente en la vida pública ideales que considero capitales, como la unidad de España, la lucha contra el secesionismo, los derechos lingüísticos para que nadie sea discriminado por estudiar en español en España, la libertad económica y el descenso de impuesto y trabas, la disminución de la sobredimensionada administración, o la correcta fiscalización del mal uso de los fondos públicos. Para defender, en definitiva, los ideales de libertad, igualdad de oportunidades y justicia en los que fervientemente creo.

Sin embargo, aquella ilusión inicial, se ha tornado poco a poco en una profunda decepción tras la coalición electoral que provocó mi llegada a VOX, decepción derivada de la imposición de un dogmatismo que golpea como un yunque en todos aquellos ideales que parecieron hacer a VOX necesario.

Múltiples escándalos de supuestas irregularidades que no sólo no se investigan sino que se protegen, la exclusión y el insulto constante a los demás partidos, demagogia, homofobia, y extremismos varios. En contraposición a la política basada en ofrecer soluciones reales con principios claros, política de titular, donde lo importante es hacer ruido para salir en prensa, y para lo cual todo vale, incluso la manipulación, la criminalización de los disidentes internos o la banalización. Y yo no vine a la política para esto.

He sentido profunda vergüenza viéndome relacionada con un oportunista independentista como Salvini. O viendo como se utilizan obviedades como “los derechos de todos ya están protegidos en la Constitución”, con el objetivo de que derechos adquiridos como el matrimonio entre homosexuales se conviertan en el derecho a hacer “lo que quieras mientras yo no lo vea”, en una vuelta al armario. Viendo como una foto con la bandera del movimiento gay es motivo de expulsión del partido. Viendo también como se manipula la realidad¡ para vincular directamente el terrorismo con la inmigración, con el único fin de atacar a todas aquellas organizaciones que no participan de ese proselitismo confesional internacional al que VOX pertenece. Criminalizando a la mujer que pasa por el trauma de abortar, sin atender a sus circunstancias, dirigiéndose a la posibilidad incluso de estatalizar a los niños, o irrumpiendo en minutos de silencio con pancartas políticas. VOX no es un partido político. VOX es un “movimiento” extremista y antisistema, y con ello me ha traicionado. Nos ha traicionado a todos los que hemos trabajado por un proyecto cuya seña de identidad era el sentido común y que ahora vemos como se ha convertido, al calor de las financiaciones, en un ejemplo claro de proselitismo totalitario.

Advertisement

El fin no justifica los medios, nunca. Por ello, quiero anunciar mi renuncia a liderar ninguna de las listas de VOX de cara a las elecciones del próximo 10 de Noviembre, así como también el fin de mi militancia en el partido, desde el convencimiento de que es el único paso consecuente con lo que sé y lo que siento y que por tanto me permitirá avanzar con la conciencia tranquila. España no necesita seguir mirando al futuro desde los odios y el bloqueo. España necesita estabilidad, sentido de Estado, abandonar la polarización y proteger los derechos y las instituciones, tan vilipendiadas por los extremos últimamente.

España necesita mirar al futuro con frescura, esperanza y evolución. Y muy a mi pesar, este movimiento ha demostrado en demasiadas ocasiones lo contrario. Por eso prefiero irme a casa que seguir en VOX.

Escriba una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Salir de la versión móvil