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Armando Robles: “La televisión en la España de Franco era mejor y más decente”

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Imagen de las estudiantes de la Universidad Rey Juan Carlos que han realizado el reportaje.
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[embedyt] https://www.youtube.com/watch?v=Hu-3eI6ojQY[/embedyt]Ofelia Yagüe.- “Siempre hemos oído hablar de la manipulación y censura de los medios, pero nos preguntábamos cómo de manipulable puede llegar a ser la información que recibimos cada día y también de cuánta se nos priva para el beneficio de unos bandos o el daño de otros”, señala un grupo de seis estudiantes de Comunicación de la Universidad Rey Juan Carlos que han abordado en un reportaje la “censura mediática” en el franquismo y en la democracia.

Sandra Cepeda Álvarez, Amaia López Samaniego, Paloma Luque Sánchez, Sofía Rodríguez Rincón, Sofía Santos García y Carolina Soriano Ribeiro son los nombres de los autores del trabajo, que han contado con el testimonio del director de AD, Armando Robles, entre otras personas vinculadas al mundo informativo.

Robles ha denunciado la “censura encubierta” que existe en los medios informativos, “instrumentos en poder de las élites y al servicios exclusivo de partidos políticos”. En este sentido se refirió al hecho de que los grandes medios no investiguen ni sean críticos con las grandes corporaciones empresariales. “Si ‘El Corte Inglés’ factura en publicidad más de un millón de euros cada año a un determinado medio, con qué autoridad puede ese medio ser crítico con esta empresa. Y quien habla de ‘El Corte Inglés’ puede hablar del Banco Santander, de las empresas eléctricas o de la multinacional del señor Ortega. Hoy los grandes medios se autocensuran en base a los ingresos económicos de los que dependen. Los grandes medios no tienen ninguna autoridad moral para hablar de la censura en el régimen franquista”, señaló.

Abundado en esta cuestión, Armando Robles manifestó que la orientación actual de los grandes medios audiovisuales tienen como dudoso principio deontológico la consecución de audiencia a cualquier precio. Comparó este escenario con el que existía en la España de Franco. “La televisión de aquel denostado régimen no estaba orientada al adoctrinamiento ni a exaltar los peores instintos de los telespectadores, como ocurre actualmente. La televisión franquista tenía como objetivo formar y entretener. Habían programas concursos como el ‘Un, dos, tres’, que no han sido superados. Las series, como ‘La casa de la pradera’, transmitían valores y se veían en familia. Los programas didácticos eran del tipo de “El hombre y la tierra”, de Félix Rodríguez de la Fuente. Los viernes por la noche, a la misma hora que Telecinco emite ‘Sálvame’, se proyectaba una obra de teatro (‘Estudio 1’), que era el programa cultural de referencia. Los entrañables “payasos de la tele” marcaron a los niños de mi generación recreando nuestra mirada al pasado con calidez y nostalgia. Aquella televisión no pretendía adoctrinar ni embrutecer a los españoles, sino entretenerlos y formarlos. Era una televisión mejor y más decente que la que se hace hoy”.

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El director de AD también evocó la importancia social del cine español de aquella época. “Hace 50 años, el cine español no necesitaba ser subvencionado porque los metrajes se hacían para entretener o para transmitir valores que por lo general eran y son mayoritariamente aceptados. La prueba es que, pese al tiempo transcurrido, las películas de Paco Martínez Soria, de Tony Leblanc, de Alfredo Landa, de José Luis López Vázquez, de Antonio Gariza, entre otros muchos, son repuestas una y otra vez y siguen teniendo audiencias más que notables. Nada que ver con el nivel de inmundicia moral que cubre al cine español de nuestros días. Son películas que no han sido hechas para entretener, sino para reflejar una sociedad partidaria, pornográfica y frentista, en la que los delirantes mensajes contra media España o contra la Iglesia son casi los únicos momentos dialogados del metraje”.

En definitiva, un testimonio, el de Armando Robles, que contrapuntó, en base a su experiencia personal, el de otros de los intervinientes en el asunto planteado por los alumnos de la Universidad Rey Juan Carlos en el notable trabajo realizado.

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