Opinión
Matando ruiseñores: sabemos lo que hicisteis en la última República

A partir del 18 de julio de 1936, se produjo el asombroso fenómeno de la invasión de España por un número indeterminado de naves alienígenas, extraños y desconcertantes OVNIs que con sus ojos luminosos buscaron por muchos rincones de nuestra Patria a monjas y frailes, sacerdotes y obispos, e incluso a simples católicos que pasaban por allí o allá, cuyos crucifijos y rosarios detectaban con su altísima tecnología.
En implacables razzias, en pogroms incontenibles, en cacerías pasmosas, las naves produjeron un tremendo fenómeno de abducción de muchos religiosos, hasta el punto de que «desaparecieron» en torno a los 7.000. Así, sin más: se volatilizaron, se esfumaron, se los tragó la tierra, se los llevaron en sus carros de fuego no se sabe bien adónde, aunque, como una parte de estas víctimas abducidas ya ha sido beatificada, se supone que hacia las praderas celestiales.
Más o menos esto es lo que ya cuentan a los niños en las escuelas, donde les explican que en aquellos lejanos tiempos bastaba con chasquear dos dedos para hacer desaparecer a un católico, a un adorador nocturno, a un requeté, a una monja concepcionista, a un claretiano de Barbastro.
Pero hay más, damas y caballeros, porque la feligresía católica no fue la única en desaparecer, ya que, al alimón con ella, también esas naves de otros mundos abdujeron a milicianos puño-en-alto, a todos los torturadores que veían con su ojo tipo HAL 9000, a los chekistas luciferinos que bebían la sangre de sus víctimas, a los revolucionarios que hacían chorizos con la carne masacrada de sus víctimas. Mas aquí el apocalipsis abductor fue todavía más implacable, ya que, mientras que sobrevivieron algunos religiosos, no quedó ningún miliciano, todos se evaporaron, se desintegraron en magmas etéreos: solo quedó la buena gente. O igual sucedió otro fenómeno asombroso: que, por una memorfosis kafkiana, los asesinos se convirtieron en corderitos lechales, o en encantadores pussycats.
Vaya casualidad, que desaparezcan a la vez religiosos y milicianos, que desaparecieran los desaparecedores, y que, para culminar la apoteosis de magia a la «Houdini» aparecieran por doquier, como traídos de otro planeta, legiones de seres angelicales, de buenísimas personas, de luchadores pacíficos por la libertad, que, lejos de cometer maldades y fechorías ―noooo, qué va― fueron fusilados sin piedad en las numerosísimas cunetas por orden de un Darth Vader con bigote, que los genocidó porque sí, a los pobres que no habían hecho nada.
El caso es que estos genocidados no están apareciendo en las cunetas que con tanta porfía buscan los herederos de los desaparecedores, sino que más bien aparecen los otros desaparecidos. Otro fenómeno asombroso, magia potagia…
El caso es que, allá, en las cumbres del Himalaya de mentiras, estas naves alienígenas se ventilaron a la flor y nata de nuestro clero, o igual los tiraron por sus barrancas, vete a saber, embutidos en cajas de madera atiborradas de cal viva. Lo malo es que sus abducciones no eran incoloras, sino un tanto gores, ya que se teñían con la sangre que manaba a borbotones de sus gargantas cercenadas, de sus miembros serrados y echados de comer a los cerdos; tampoco eran indoloras, por el espanto de los ojos arrancados, los testículos arrancados, los pechos cortados, los úteros violados llegaría posiblemente hasta el fatídico planeta desde el que un dios cornudo envió a sus escuadrones abductores. Todo este horror lo explico con detalle en mi libro El Himalaya de mentiras de la memoria histórica.
Según la televisión de Rosa María Mateo, las 14 monjas concepcionistas franciscanas que fueron beatificadas el pasado 22 de junio fueron un ejemplo más de esas «desapariciones», que se produjo no se sabe bien cómo, aunque ya les digo que este portento fue obra de extraterrestres, porque la gente del inframundo no es de esta Tierra, claro.
Portento donde los haya, que te beatifiquen por desaparecer, sin que haya que hacer nada más, con el «Houdini» chequeando los procesos de beatificación. Dentro de nada, ya verán, el señor de las Moscas empezará a «beatificar» ―bueno, esta palabra no es la más exacta: la correcta ya la saben ustedes― a aquellos milicianos «desaparecidos», y qué les voy a decir que hará con la hueste de buena gente que fue juzgada y fusilada sin ningún motivo.
O sea, que no mataron ruiseñores en aquellos tiempos, sino que, simplemente, volaron, desaparecieron…
Como se dice en la película «Matar un ruiseñor»: «Prefiero que dispares a latas en el patio trasero, pero sé que vas a ir tras los pájaros. Dispara a todas las urracas que quieras, si puedes golpearlas, pero recuerda que es un pecado matar a un ruiseñor». «Los ruiseñores no hacen nada malo, sino que hacen música para que disfrutemos: no comen los jardines de la gente, no anidan en graneros, pero cantan en sus corazones para nosotros. Por eso es un pecado matar un ruiseñor».
Pero, ojo, porque sabemos lo que hicisteis en la última República…

Opinión
Alberto Núñez “Fiascóo” el autócrata. Por el Coronel Efrén Díaz Casal

Oye “Fiascóo”:
Desde que el Partido Popular tuvo la desgracia de que okupases el despacho principal de Génova 13, he derrochado ríos de tinta en telemáticas misivas solicitándote que requieras a los militantes del PP que gobiernan ayuntamientos para que acaten la Ley Orgánica 9/1983, de 15 de julio, reguladora del derecho de reunión, en la tramitación de actos religiosos en la vía pública.
Hasta la fecha no has tenido la cortesía de contestarme: o careces de esa virtud cívica exclusiva de los bien nacidos, te faltan razones que oponer a las mías o ambas cosas. En cualquier caso, te devuelvo tu descortesía con mi desprecio, no sin recomendándote que cambies tu ejecutoria puesto que con ella no vas a ninguna parte.
El displicente silencio con el que desde hace prácticamente 1 año me vienes penalizando constituye una ofensa a mi dignidad, pues cuando alguien dirige una correcta misiva a otra persona, el civismo más elemental exige respuesta, máxime si se trata de cumplir una Ley Orgánica como es el caso.
Consiguientemente es una verdad irrefutable que te importa un bledo el cumplimiento de la citada Ley Orgánica 9/1983 por los ayuntamientos regidos por militantes del PP. ¿Es así como piensas llegar a La Moncloa? Como no sea de visita, ya me contarás cómo.
Tu ejecutoria en el caso que nos ocupa constituye una ofensa a mi dignidad a la que, en legítima reciprocidad y si yo me rebajase a tu altura, respondería adecuadamente.
Eres un fiel representante de la enfermiza soberbia que aqueja a los dirigentes del PP; no te preocupes por tener una entrevista conmigo sobre el asunto en cuestión, en la que estoy seguro que podré mirarte fijamente a los ojos sin deslumbrarme.
Después de todo, indiscutiblemente tienes suerte, tú nunca podrás morirte de un derrame cerebral.
Como consecuencia de tu ejecutoria los ayuntamientos gobernados por militantes del PP, entre ellos el de la capital de España, continúan vulnerando la Ley Orgánica 9/1983 con tu tolerante silencio.
Tampoco te has dado por aludido cuando te he comunicado que Isabel Díaz Ayuso premia con altos cargos y suculentos sueldos a Concepción Dancausa Treviño, Consejera de Familia, Juventud y Política Social, y a Luis Martínez-Sicluna Sepúlveda, Viceconsejero de Familia, Juventud y Política Social que, en sus anteriores cargos de Delegada y Subdelegado del Gobierno en Madrid, quebrantaron reiteradamente la Ley Orgánica 9/1983, de 15 de julio, reguladora del derecho de reunión consagrado en nuestra Carta Magna, en la tramitación de actos religiosos en la vía pública, a pesar de mis numerosos comentarios que le he remitido en contra.
En cuanto a tu comportamiento al respecto con el desgobierno que padecemos deja todo que desear pues después de 1 año de mis reiteradas misivas, has sido incapaz de presentar acción parlamentaria alguna contra el cuestionado Marlaska, más bien al contrario, te has abstenido en la moción de censura contra el desgobierno que sufrimos: eres una oposición cómoda.
Has observado la misma indolente actitud con Isabel Díaz Ayuso, que te está comiendo la merienda, al no indicarle que dirija sus constantes críticas contra Marlaska, todavía ministro del Interior, y contra Mercedes González, ascendida a directora general de la Guardia Civil posiblemente por su contumaz vulneración de la Ley Orgánica 9/1983, al igual que tú y con la que no tiene empacho en hacer turismo en el Vaticano para ver al Papa con quien ninguna tiene nada en común y solo pretenden publicidad, en tanto que Almeida, todavía alcalde de Madrid, iba de palmero.
Confío que los militantes, simpatizantes y votantes del PP en posesión de la facultad de pensar, tengan el civismo de defender el ordenamiento jurídico de nuestro Estado de Derecho en general y la Ley Orgánica 9/1983 en particular, retirando el apoyo a la ciega autocracia que estos hechos representan.
Efrén Díaz Casal
Coronel de Infantería (R)
Opinión
El CIS dice la verdad

«Retenga en su mente por un momento la imagen: Sánchez sale en Ferraz en diciembre de 2023 anunciando que ha ganado las elecciones»
Imagínelo por un segundo. Piense que Tezanos no fantasea, que no es la obediente voz de su amo, y que los españoles engordan a Frankenstein en las urnas. Retenga en su mente por un momento la imagen: Sánchez sale en Ferraz en diciembre de 2023 anunciando que ha ganado las elecciones. Los feligreses sanchistas, apostados desde horas antes en la calle, corean que quieren un gobierno de coalición con Podemos -o lo que surja-, Rufián y Otegi.
En las sedes de ERC y Bildu se descorcha cualquier botella, aunque esta vez no será para hacer un cóctel molotov. Ha ganado Sánchez, su candidato. Es el momento de avanzar en la ruptura del orden constitucional como paso previo a la independencia de los territorios. Sus regiones son naciones, y toda nación tiene el derecho a decidir. Otegi toma la delantera y sale en público acompañado del habitual coro de la herriko taberna. Ropa de Alcampo, barbas descuidadas y flequillos a media frente. «Vamos a aprovechar la ocasión. Se lo debemos a los compañeros que lucharon contra el franquismo hasta 1983», dice el viejo dirigente de ETA ante las cámaras de RTVE.
Rufián apura el vaso de plástico, consigue abotonarse la americana y sale en rueda de prensa. «Este Gobierno depende de nosotros, y se hará lo que digamos», piensa en voz alta el independentista. Lo hace sin rubor porque es consciente de que tiene bula para el insulto y la arrogancia. Es más; sabe que Sánchez no se atreverá a discutir en público nada de lo que diga. Mientras Rufián habla, gente con banderas indepes llenan las calles del centro de Barcelona. Se abrazan y dan vivas. Al grito de «¡Ahora solo son desórdenes públicos y no golpe de Estado!» hay algún conato de tomar alguna institución, pero lo procrastinan por pereza.
En Madrid, Podemos, o el branding que se les ocurra cuando se junten o no con Yolanda Díaz, ha montado una carpa en el centro. Se oye música para el empoderamiento femenino. No faltan los sones indígenas, la batucada y las niñas del coro de Ángela Rodríguez Pam, que han montado un grupo de pop suave. Tras la pelea entre Belarra, Montero y Díaz para decidir quién habla, vence la ministra de Igualdad. «Si esta no es la victoria de las mujeres, no es de nadie», dice la vecina de Galapagar. «¿Qué es una mujer, ministra?», susurra vengativa Díaz. Irene sale cabreada al escenario, como siempre, dispuesta a meterse con la otra parte de España. «No lo han conseguido. No pasarán. Vamos a seguir», amenaza con el puñito en alto.
«El PP de Feijóo ha perdido aunque ha subido un 8% su voto. A duras penas llega a los 105 diputados»
En otro punto de la ciudad, en la calle Génova, todo es sombrío en esa noche electoral. El PP de Feijóo ha perdido aunque ha subido un 8% su voto. A duras penas llega a los 105 diputados. El despacho del presidente empieza a vaciarse, y los afiliados populares vuelven a sus casas con la bandera al hombro. Comienzan a oírse voces para cesar a Feijóo y sustituirlo por alguien que haya triunfado en las autonómicas de mayo de 2023. «El partido necesita un revulsivo», dice uno en plan futbolístico. «España lo demanda», apunta otro. «¡Sangre nueva!», afirma alguien como si fuera una carrera de caballos. «En Alemania harían una gran coalición», apunta esperanzado el que todavía no ha pagado la hipoteca. «Tendríamos que haber sido más duros, y no tragar con la ideología de género, el rollo ecologista y demás mierda», suelta otro a quien su compañero le recuerda que Vox no ha tenido mejor suerte.
Porque el partido de Santiago Abascal ha perdido cinco puntos, y con eso llega a los 30 escaños. Ese número no da ni para sumar con la derecha «cobarde». Cuántos jarros de agua fría, y cuánta gente hay que echar. Sí, sobre todo a esa que se acercó al calor del cargo y el sueldo, a esos patriotas de última hora que se apuntaron con el lema de «#SoloquedaVox». Ya pasó en Ciudadanos y fue muy triste. «España no ha entendido nada», dice un antiguo falangista. Otro habla de la manipulación de la prensa, que «siempre intoxica». «Ya os dije que lo de Tamames era una gilipollez», suelta un oportuno. Abascal toma unos papeles y se prepara para dar la cara. «¿Quién sale con Santi?», pregunta un asesor.
En el fragor de la noche aparece Sánchez. Oh, es él. El vencedor. En verdad no nos merecemos a su augusta persona. Cree que en su mano está todo el poder. Pasará a la historia. Justo lo que él quería. Que le den a la Unión Europea y a la ONU. Ya no necesita un cargo internacional en enero de 2024. Puede seguir en Moncloa. El Falcon calienta motores. Sube las manos como el Papa y consigue que el público congregado en Ferraz guarde silencio. Todavía se oye algún grito contra el PP y Vox. Están ebrios de victoria. Ningún escándalo de corrupción ha podido con ellos. Ni los ERE de Andalucía ni Tito Berni, o la ley del sólo sí es sí. Tampoco ha erosionado al partido su cesión a los nacionalistas. Ni la negligencia durante la pandemia, que se llevó a 150.000 personas. Ni la voracidad impositiva, la inflación y la carestía de la vida. Menos aún el deterioro de la democracia liberal. «¿De qué sirve el sistema democrático cuando gobernamos nosotros? Pues eso», piensan.
Sánchez está feliz. Por fin tiene un baño de masas. Nadie dice ahora «Que te vote Txapote». Su Sanchidad se retrasa un poco para tomar la palabra. Le acompaña Begoña. No hace falta nadie más. El rey y la reina. Anuncia allí mismo que va a gobernar con el apoyo de los grupos «progresistas». España es suya. Su Estado, también. Gobernará por decreto, como siempre, hasta 2027. Ya lo dijo Tezanos.
Opinión
Feministas, la ruina de nuestra sociedad

Por Allison Santa Rita.
Nuestra sociedad actual está obsesionada con impulsar meses o días nacionales como el Mes Nacional de la Historia de la Mujer. Estoy segura de que podríamos entrar en los tecnicismos del motivo del Mes Nacional de la Historia de la Mujer pero, sinceramente, no me importan.
Los hombres no tienen un mes dedicado a ellos, entonces, ¿por qué deberían tenerlo las mujeres? Sinceramente, creo que el feminismo moderno ha arruinado a Estados Unidos y ha hecho que la vida de las mujeres sea más difícil de lo que nunca debió ser. Si bien aprecio la oportunidad de ganar dinero para mí mientras no estoy casada, no anhelo el día en que deba seguir trabajando una vez que lo esté. No estoy agradecida a las mujeres en la historia por hacer eso posible. En cambio, desearía que todavía fuera el momento en que la gente se casaba más joven y las mujeres trabajaban en el hogar y criaban a los niños. Entiendo que el tiempo ha pasado, y bromas aparte, estoy agradecida de que las mujeres puedan trabajar fuera del hogar si así lo desean. Todo lo que digo es que las mujeres en la historia y en el mundo de hoy han llevado los esfuerzos por la igualdad de derechos demasiado lejos.
Si las mujeres quieren ser iguales a los hombres, bien. Deben inscribirse en el borrador. No tienen permiso de maternidad. Se espera que trabajen de manera enfermiza y no prioricen a su familia. Y lo más apropiado es que no tienen un mes dedicado a destacar a personas importantes de su género específico.
Mes de la historia de la mujer
Durante el Mes Nacional de la Historia de la Mujer, las personas destacan muchos esfuerzos monumentales que empujaron a las mujeres a la sociedad en la que vivimos actualmente. Me encanta que las mujeres puedan participar en atletismo, tener un trabajo si así lo desean e incluso conducir. Pero, en el esfuerzo de las mujeres por ser iguales a los hombres, continuamente han menospreciado a los hombres y han actuado como si los hombres fueran menos que las mujeres. Mientras trataban de ser iguales, dividieron nuestros géneros. Empujaron a las mujeres al frente de nuestra sociedad y reprimieron a los hombres convirtiéndolos en débiles niños beta que ceden a lo que la sociedad dice que deben ser. Dedicamos un mes entero a empoderar a las mujeres de la historia, algunas de las cuales hicieron grandes cosas. Si vamos a tener un mes dedicado a las mujeres, entonces debemos tener lo mismo para los hombres. Estoy harta y cansada de escuchar a las mujeres decir que quieren ser iguales a los hombres, pero no están dispuestas a darles a los hombres los mismos derechos que ellas tienen.
Las mujeres pueden optar por abortar, los hombres no. Las mujeres pueden elegir carreras como niñera sin que la gente cuestione sus motivos, los hombres a menudo están mal vistos o incluso se les insinúa que son asquerosos. Las mujeres pueden optar por quedarse en casa si lo desean, pero si un hombre tomó esa decisión, la gente a menudo los llama flojos y vagos por no mantener a su familia.
Entonces, bien, si queremos darles a las mujeres los mismos derechos que a los hombres, entonces debemos darles a los hombres los mismos derechos que a las mujeres. Debemos hacerlo sin juzgar, sin odio, sin preguntas ni nada que pueda hacer que los hombres se sientan menos por sus elecciones. Dado que así es como las mujeres quieren ser tratadas cuando pueden elegir, así es como deben ser tratados los hombres.
El feminismo moderno ha arruinado verdaderamente lo que significa ser mujer. Deberíamos celebrar a las mujeres que se quedaron en casa para criar a sus hijos y atender su hogar.
Deberíamos celebrar a las mujeres que alentaron a los hombres y al mismo tiempo defendieron sus derechos como mujeres. En última instancia, deberíamos tener un mes dedicado a celebrar a los hombres. Si las mujeres no pueden ponerse de acuerdo en dedicar un mes a todos los hombres increíbles de nuestra historia, entonces debemos deshacernos del Mes de la Historia de la Mujer. Si las mujeres quieren igualdad, entonces deben proporcionarla para ambos géneros, no solo para ellas.
Opinión
Bruselas toma a Sánchez por trilero y malversador. Por Jesús Salamanca Alonso

«Varios gabinetes de altos cargos europeos son conscientes de que hay proyectos en Canarias y otras partes de España donde se ha empleado dinero público procedente de los fondos europeos».
Más problemas y más corrupción dentro del PSOE: Bruselas no cree a Pedro Sánchez y le toma por un malversador y un trilero. Mónika Hohlmeir no se fía de él porque ha desviado fondos públicos de las ayudas europeas y no hay manera de hacerlas un seguimiento formal y racional. El caso «Tito Berni», que acabará convirtiéndose en el «caso Patxi López» o en el «caso Marlasca», ya huele a podrido, algo que acostumbra a hacer el socialismo cuando se siente acosado por la Justicia y por la oposición o cuando lo pillan en un renuncio como es el caso.
Pedro Sánchez vuelve a estar en entredicho y es sospechoso de corrupción, malversación y trampeo para la UE. Tampoco pasaron desapercibidas sus tramas mafiosas que abarcan un amplio espectro: desde la falsificación de su tesis doctoral con párrafos de Ramón Tamames hasta tener conocimiento del actual caso «Tito Berni» desde hace un año, pasando por ilegalidades denunciadas por el Tribunal Constitucional, represión a la ciudadanía para medrar y corromperse a su antojo, consentir el enriquecimiento de sus cercanos con las mascarillas o sembrar dudas sobre las fechorías de su esposa o barragana en Marruecos. Pero saldrá: puedo prometer y prometo que saldrá a la luz, incluso antes de lo que cree el propio presidente, su ministro arcabucero Grande Marlasca o el ministro «perejil». ¿Apostamos a que Mohamed VI lo canta antes de las elecciones generales para chantajear al presidente a cambio de dinero? Tras una mujer chapucera nunca hubo un gran hombre, ni siquiera un buen hombre, pero sí un puntual zoquete para el hazmerreír general.
Hasta el gorro ha salido la propia presidenta de la comisión de Control Presupuestario del Parlamento Europeo, la alemana Monika Hohlmeir. De ahí que haya solicitado con insistencia a la Comisión Europea que abra una investigación urgente sobre los fondos europeos que Bruselas destinó a España. Hay pruebas suficientes respecto a que una parte importante del dinero se destinó a ramas diversas del «caso Mediador». Como ven empieza a ser un galimatías: cada uno lo llama de una manera, en función de en quién se quiere cargar tintas, pero todos están en el caso, desde el mediador, pasando por el «diputero» Tito Berni, Grande Marlasca por ocultarlo tras saber del caso desde hacía un año largo y el propio Patxi López, por bocazas a destiempo, vocinglero desnortado, desconocedor de datos precisos y chulo de feria podrida.
Y si pensaba el partido socialista, con Sánchez y Grande Marlasca a la cabeza, que pasando a investigar a la Guardia Civil para buscar cabezas de turco y las tramas en diversos cuarteles, se iba a olvidar el conjunto de orgías «Bernianas», lupanares, restaurantes con precios a «cojón de obispo», drogas mil y prostitutas de caro catálogo, se equivocaba porque es un tema que no se va a dejar de lado hasta las elecciones generales de diciembre. Lo que menos interesa es saber si se intervino en cuarteles para sisar dinero de los fondos europeos. Lo que interesa de verdad es conocer en qué cuarteles se enterraron millones para enriquecimiento de cuatro ladrones socialistas, cuánto se gastó, en qué obras, quién autorizó esas y por qué se intentaba robar a Europa engañando a la comisión europea.
La trama de corrupción está muy extendida entre los socialistas del Parlamento español. Recuerden que hace unos meses también pillaron una mafiosa trama del grupo parlamentario socialista en la cámara europea. Donde van roban, defecan como el pato Argón y se llenan los bolsillos al más puro estilo del Dioni. Esta misma semana, como no podía ser de otra forma, la Fiscalía Anticorrupción de la UE ha mostrado excesivo interés en el caso de las prostitutas, la droga y las comisiones desorbitantes a cambio de engañar a empresarios españoles para sacar tajada.
La Unión Europea quiere que la juez española que lleva el caso conocido de varias maneras le entregue documentos de todo tipo, contratos y compromisos firmados que afecten al «caso Berni», «caso Mediador», «caso Marlasca» o «caso Patxi López». Lo que más me preocupa y me fastidiaría es comprobar que dejan meter baza a la fiscal Concepción Sabadell, fiscal española, prosanchista enchufada y con una dudosa credibilidad tras ser mandada a Bruselas para manchar a los hermanos Díaz Ayuso; suerte que le salió rana y Sánchez perdió otra baza y mucha munición contra la presidenta madrileña.
Varios gabinetes de altos cargos europeos son conscientes de que hay proyectos en Canarias y otras partes de España donde se ha empleado dinero público procedente los fondos europeos. Incluso dinero que no se utilizó para el tema de los volcanes y sí para los ruinosos y sectarios de mal llamados de clase, que nada gestionan, pero que de todo se aprovechan. Afirma la presidenta de la Comisión de Control Presupuestario que le llegan «muchas noticias preocupantes sobre la ejecución de determinados proyectos en las Islas Canarias, en los que podrían estar en juego fondos de la UE y, más concretamente, del fondo de Recuperación y Resiliencia». Lo que faltaba al ministro «perejil» y a «Marisú» Montero, preocupante y fantasiosa ministra de Hacienda.
La jefa de la comisión insiste en saber qué parte de los fondos europeos se han utilizado en tramas corrompidas por el PSOE. De ahí que pida un seguimiento exhaustivo para poder dar explicaciones ante la comisión de control. Ya nadie duda de que van a salir sapos y culebras en la investigación abierta, incluso organizaciones que se dedicaban a montar sobornos y engañar a empresarios, ganaderos, comisionistas e intermediarios. ¿Y qué recibían a cambio? Pues de todo, pero principalmente contratos frondosos, todo tipo de subvenciones; es más, hasta se comprometían con ellos los socialistas corruptos a eliminarlos las sanciones administrativas y de otro tipo que los afectaran. En fin, y aprovechando que Belarra sigue esputando y apedreando a los empresarios, Coca-Cola se ha hartado y ya piensa en cambios de grueso calado. ¿Cuánto de atrevimiento tiene la ignorancia?
¡Tito Berni, Tito Berni! Posiblemente este «diputero» y otra docena más, que saldrán a la luz en unos días, se han cargado la presidencia europea de Pedro Sánchez. Y si no se la retiran, la ejercerá de una forma tutelada. Nunca un presidente de Gobierno español había caído tan bajo y tampoco había sido tan ruin, ni siquiera el hazmerreír de doctor por la Universidad de León, Rodríguez Zapatero.