Efectivos de la Comisaría General de Información de la Policía Nacional y de la Jefatura de Información de la Guardia Civil detuvieron el pasado miércoles en el barrio de Santa Eugenia de Gerona a un yihadista que, entre otros atentados, pretendía un ametrallamiento masivo de turistas en las playas de Benidorm. El titular del Juzgado de Instrucción número 2 de la Audiencia Nacional, Ismael Moreno, ordenó este viernes el ingreso en prisión comunicada y sin fianza de Fath Allah Benhachem Gharrass, de 28 años, de origen marroquí y nacionalidad española, a quien no le fueron incautadas armas.
El arresto de Benhachem, que se ha conocido este viernes por la tarde, tuvo lugar gracias al aviso del FBI estadounidense, que fue el que avisó a las fuerzas de seguridad española de su grado de radicalismo y del proselitismo a favor del Daesh en las redes sociales, en internet y, también, en la Deep Web, la red profunda usada por criminales y delincuentes y que está fuera del alcance de la mayoría de internautas.
Precisamente, la intención del yihadista, que fue capturado dos horas antes de los ataques de Algeciras, era colgar en estas redes del Estado Islámico el ametrallamiento de los bañistas tras grabar el atentado en Benidorm, una de las localidades emblema del movimiento LGTBI.
Lo cierto es que el yihadista ya había realizado prácticas de tiro. En su domicilio de la calle Montseny, en Gerona, se encontró una silueta de cartón de las usadas en las galerías con siete impactos. Además, se encontraron seis vainas de dos calibres diferentes: 9 milímetros y 38 Special.
El seguimiento del FBI a los diferentes alias que usaba en la red, como “Daniel Lofti’ o ‘Pipa4545’, fue el que desveló sus planes de atacar en la conocida localidad turística alicantina en nombre del Daesh. La monitorización de sus conversaciones en la red y también los posteriores pinchazos telefónicos desvelaron que ya había comenzado a hacer las gestiones con otro radical, de alias ‘Karim el Maghrebi’ y que probablemente se encuentre fuera de España, para adquirir fusiles AK-47, pistolas de 9 milímetros de la marca Glock y cinturones para explosivos. Las gestiones en el mercado negro, explican fuentes de la lucha antiterroristas, estaban avanzadas, aunque por el momento el yihadista no había conseguido ningún arma de fuego.
La otra gran fijación del terrorista era atentar en España contra ciudadanos marroquíes, a los que criticaba por su occidentalización, aunque no se han descubierto por ahora los planes concretos. También habló en las redes en las que se mueven los partidarios del Estado Islámico de tratar de matar algún judío residente en España o contra autoridades de Marruecos o de España.
Según informó este viernes Interior, el detenido, además, era muy aficionado a visionar la ejecución de atentados yihadistas en Europa. El mismo día de su detención hizo búsquedas de cómo llevar a cabo apuñalamientos y de atentados efectuados con este tipo de armas blancas, según reveló el departamento que dirige Fernando Grande-Marlaska. Hasta 18 veces visionó el vídeo real de un apuñalamiento de una persona en un tren para, supuestamente aprender la técnica. Este supuesto ‘lobo solitario’ también se instruía con vídeos de acuchillamientos en las cárceles norteamericanas o con atentados yihadistas por apuñalamiento en Londres o en Túnez.